La PDI detuvo a seis personas que obtenían la droga en la Región de Valparaíso. Está involucrado un exchofer del único Centro de Asistencia Familiar en la isla de Robinson Crusoe.
La Policía de Investigaciones desbarató una red de seis traficantes chilenos que lograron ser detenidos esta semana por traficar droga desde el continente al archipiélago Juan Fernández, un lugar en el que cerca del 40% de la población de la isla es consumidor de algún tipo de sustancia ilícita.
En La Tercera indican que los criminales pertenecían a bandas de tres personas con líderes distintos y obtenían la droga en las ciudades de Viña del Mar y Valparaíso, procediendo luego a ocultarlas en diversos alimentos, incluyendo frascos de mayonesa, mariscos e inclusive carne molida.
Una vez realizada la tarea de ocultamiento, las bandas realizaban envíos camuflados a bordo de barcos subsidiados por el Estado.
Su red de tráfico se extendió por más de un año y se centraba en el tráfico de marihuana, cocaína y pasta base, cuya distribución en Juan Fernández se llevaba a cabo por parte de un dealer. Aunque no se trataba de grandes cantidades de sustancias, su tráfico alertó a la pequeña población local en la isla Robinson Crusoe.
Quiénes eran los seis traficantes y cómo operaban
Como parte de la investigación se identificó que Rodrigo Becerra Zúñiga, quien fue un empleado público que hasta mayo de 2024 trabajó como chófer del único Centro de Asistencia Familiar de Juan Fernández, recibió y transportó la droga en el archipiélago.
Su exsuegra, María Tapa, se encargaba de realizar el almacenaje y el envío marítimo, el cuál operaba desde una bodega de la empresa marítima Transmarko, aunque por ahora no se ha determinado que esta última estuviese involucrada. En tanto, se determinó que Camilo Mori Sáez compraba droga y la escondía en los productos.
Por otro lado, el ingeniero comercial Pablo Aguayo Depallens coordinaba la compra y envío de la droga liderando otro frente, en el que también participaban Marco Gagliardi Miranda y Pamela Camus Villa.
Los detenidos fueron formalizados por los delitos de tráfico de droga y asociación ilícita.
En tanto, Becerra también es investigado por amenazas que habría realizado en contra del alcalde Pablo Manríquez.