Educadora de párvulo corrió desesperada hacia la unidad policial. Le volvió el alma al cuerpo tras la efectiva acción de los uniformados.
Mientras realizaban sus labores de rutina, personal de Carabineros de la 4ta Comisaría de Molina, en la Región del Maule, atendió a una educadora de párvulo que, desesperada, rogó por ayuda en el servicio de guardia: en sus brazos, trasladaba a una niña de apenas un año que presentaba signos de asfixia.
Rápidamente, los uniformados llevaron a la mujer y a la pequeña hasta el hospital de la comuna, donde lograron llegar a tiempo para estabilizar a la menor.
Posteriormente, se informó a los padres de lo sucedido, quienes agradecieron la veloz reacción de los uniformados.
Detalles del caso
Al respecto, el mayor José Cáceres Gajardo, de la 4ta Comisaría de Molina, detalló que “personal de un jardín cercano a la unidad se presentó en el cuerpo de guardia solicitando auxilio, con una menor de año, la cual mantenía signos de asfixia”.
“Rápidamente se realizaron maniobras de primeros auxilios, verificando si algún objeto obstruía sus vías respiratorias. Se pudo lograr que la menor volviera a respirar con dificultad”, añadió.
Ya en el hospital, se logró su total recuperación. Según el personal médico del centro asistencial, la menor se encuentra estable y fuera de peligro, y se determinó que la asfixia fue provocada por un episodio de llanto intenso debido a un acontecimiento previo.