Con un espectáculo bailable, cotillón y una cena pensada en los sabores que disfrutamos los chilenos, el centro de entretención ubicado en San Francisco de Mostazal adelantó una pincelada de lo que será la noche en la cual se celebrará la llegada del 2025.
Comenzó el mes de diciembre y con ello, la inevitable cuenta regresiva hasta el 31 de diciembre, la noche de Año Nuevo que muchos esperan como un momento para despedir en familia el año actual y recibir con alegría el 2025.
Un evento tan grande que hay quienes ya están preparando con lujo de detalles. Ese es el caso de Monticello, el centro de entretención de la Región de O’Higgins, quienes contarán con dos grandes eventos en sus instalaciones para quienes quieran esperar el año nuevo rodeados de buena gastronomía, música y un espectáculo pensado para toda la familia.
El evento principal que se tomará el Centro de Eventos de Monticello será la Cena de Año Nuevo, la cual se expandirá por los tres salones del espacio, tendrá un escenario, pero cuya primera estrella de la jornada será precisamente la comida.
Marco Undurraga, Chef Corporativo de Dreams y Monticello, estuvo encargado de presentar en una jornada de degustación, los platos que formarán parte de la fiesta. El menú principal contará con una comida de cuatro tiempos con sus respectivos maridajes:
Primero, un appetizer que incluye falafel y un tártaro de salmón acompañado de un espumante, entregando la frescura necesaria para comenzar la cena.
Luego, la entrada llega inspirada directamente en los sabores del mar, ya que consiste en una presentación de Atún y Pulpo, acompañados de una palta al wasabi y maridado con un Sauvignon Blanc de Viña Leyda. El atún, presentado en cubos con un breve paso por el sartén, se complementa muy bien con la salsa, mientras que el pulpo brilla por sí solo, sobre todo al ser una preparación no tradicional de la comida marina.
De fondo, una preparación clásica para el año nuevo, pero con un toque más sofisticado: un filete de res acompañado de una muselina de palta y alcachofas, vegetales glaseados y una salsa oscura de oporto, todo esto acompañado de un syrah. Es muy difícil equivocarse con un medallón de filete cocinado en su punto ideal, un clásico a la hora de celebrar momentos importantes.
Y de postre, un lingote de chocolate acompañado de frutos rojos y una galleta de vainilla que no empalaga.
La idea de esta cena es que todos puedan participar, y por lo mismo, el chef Marco Undurraga pensó en alternativas para distintos miembros de la familia. Habrá opciones veganas, que incluyen preparaciones con tofu, ceviche de verduras y ensaladas, y también un menú para niños, con la posibilidad de elegir entre puré de papas con carne de filete o bien, unos macarrones con queso y escalopa de vacuno.
Para esperar las 12, habrá cotillón especial y luego, una fiesta musical comandada por la banda coquimbana Los Viking 5, quienes animarán el espacio hasta altas horas de la madrugada, finalizando con un reponedor consomé.
El valor de la Cena de Año Nuevo, que incluye dos tragos, es de 150 mil pesos por persona, y 120 mil para los socios del Dream Club categorías One y Platinum.
Junto con la Cena de Año Nuevo, también se realizará la ya tradicional fiesta de Año Nuevo del BlackBar, pensada para un estilo más informal y para los nostálgicos de la década de los 80 y 90, presentada por DJ Fader y Catboy.
Los precios de estos eventos son los siguientes: La Cena de Año Nuevo tiene un valor de 150 mil pesos por persona, mientras que la fiesta en BlackBar, 50 mil pesos por persona. Ambos servicios incluyen dos tragos por persona, pero sin bar abierto.
La venta de las entradas puede realizarse de manera presencial en Monticello.