Como parte de la formalización, el fiscal Felipe Sepúlveda leyó una conversación que daba cuenta del esquema que se usaba y que prueba el delito de soborno que funda su solicitud de prisión preventiva.
Como parte de la formalización del Caso Audio, el fiscal Felipe Sepúlveda reveló conversaciones del abogado Luis Hermosilla para fundar la solicitud de prisión preventiva en su contra.
Explicando que en el caso de Hermosilla su relación con otros imputados excedía su labor como abogado, existiendo una “amistad sólida” por ejemplo con los hermanos Jalaff, los fundados del Grupo Patio que habrían recibido un trato preferencial por parte de Daniel Sauer, quien era defendido por Hermosilla y fue clave en todos los montos que se movían en la operación, el fiscal Sepúlveda solicitó abordar los audios al centro de todo el caso.
En ese contexto, el fiscal leyó segmentos del audio filtrado entre Hermosilla y Sauer sobre el esquema de facturas falsas que probarían el delito de soborno que es investigado en este caso.
En esa línea, y tras abordar la necesidad de la creación de “una caja” para gastos, “una caja negra” para sustentar los “sobres” con dinero que arreglan los problemas que quieren abordar, Hermosilla explicó que los hermanos Jalaff tendrían que colaborar en los aportes para la caja en cuestión.
Asimismo, planteó que con algunos de esos dineros solicitados, que alcanzarían los 10 millones de pesos, entregaría una propuesta a uno de sus nexos en la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) que reclamaba un pago atrasado. Y fue aquí que también habrían solicitudes adicionales que tendrían que ser respondidas.
“Ahora [después de los 10 millones] quiero que me diga lo máximo: cuatro ucranianas, tres polacas, dos argentinas y todas en pelota y todas haciendo no sé qué. ¡La raja!. Pero además me ponís un yate, me ponís langosta...”, leyó el fiscal planteando que Hermosilla y Sauer conversaron sobre el monto de la operación total.
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