“Deseo haber muerto en el accidente”: habla imputado por muerte de Trinidad y Agustina tras chocar ebrio

Chofer ebrio provocó choque en el que fallecieron dos jóvenes de 20 y 19 años, respectivamente.
Chofer ebrio provocó choque en el que fallecieron dos jóvenes de 20 y 19 años, respectivamente.

Universitarias, de 20 y 19 años, perdieron la vida en la comuna de Santo Domingo.

Un impactante testimonio compartió José Venturino, imputado por el accidente de tránsito que terminó con la vida de Trinidad Bunster (20) y Agustina Espinoza (19), las dos amigas que murieron en la comuna de Santo Domingo, en la Región de Valparaíso.

Por primera vez, el estudiante de Derecho declaró en el marco una audiencia desarrollada en el Juzgado de Garantía de San Antonio.

Cabe recordar que Venturino es acusado de conducir bajo los efectos del alcohol, lo que provocó el deceso de Trinidad y Agustina. A la fecha, el sujeto cumple arresto domiciliario total en la comuna de Las Condes, medida cautelar que ha sido cuestionada por las familias afectadas.

La declaración del imputado

Pese a que las víctimas estudiaban la misma carrera y en la misma universidad que el imputado, éste dijo no conocerlas.

Según detalló BioBioChile, el joven recordó que todo comenzó durante la noche del sábado 30 de marzo, cuando se alistaba para ir a la disco.

“Mi amigo Javier me da la sugerencia de invitar a Agustina y Trinidad para que nos acompañaran a la disco. Yo no las conocía, ya que eran alumnas de la carrera de Derecho, pero de segundo año y yo estoy en cuarto… Javier lo organizó todo y me indicó dónde se estaban quedando”, aseguró.

Tras recojerlas, las jóvenes se sentaron en la parte de atrás del BMW. “No recuerdo si habían tomado alcohol o si pusieron el cinturón de seguridad. Tampoco recuerdo si Javier les dijo que se pusieran el cinturón”, agregó.

Luego, explicó que “tomé el camino de la fruta a una velocidad normal de 70-80 kilómetros por hora, que es un camino peligroso y con muchas curvas y lomas de toro, que algunas están mal señalizadas o iluminadas. No había nada de alcohol en el auto, no estábamos tomando, la música estaba a un nivel moderado para que pudiéramos hablar entre todos”.

“A la entrada del camino Las Brisas, yo señalizo a la derecha. Una vez que estábamos en camino recto, quizás estaba manejando a 90-100 kilómetros por hora, no sé exactamente a qué velocidad porque no estaba pendiente al tacómetro, estaba manejando atento. Sinceramente, no me acuerdo cómo perdí el control ni cómo se produjo el accidente, pero recuerdo que estaba afrontando la curva; lo único que recuerdo es que me desperté en el pavimento y no entiendo qué ocurrió”, añadió.

Con el correr de las horas, cuando ya había recobrado la consciencia, le tomó el peso a la tragedia.

“No podía creer que Agustina y Trinidad habían fallecido, y lo sigo encontrando injusto… Sinceramente, yo no esperé que pasara algo como lo que pasó ese 31 de marzo, una fecha que me va a marcar para siempre y para siempre a las familias de Agustina y Trinidad”, reconoció.

“Me siento tan mal de haberles causado esto a la familia de Agustina y Trinidad, tal como lo indiqué en la carta de perdón que mandé. No pretendo que me perdonen, yo pienso asumir las consecuencias de mi acto, no prendo entrar en negación de la situación, simplemente espero que la familia de Agustina y Trinidad encuentren algún tipo de consuelo o cierre con esto”, complementó.

Sobre su actual estado de salud, el joven sostuvo que “me encuentro medicado y les confieso de verdad que yo deseo haber muerto en el accidente porque lo encuentro totalmente injusto que yo esté acá y no tengo forma de decir lo mucho que lo lamento”.

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