La senadora respondió a los cuestionamientos y la intención del Partido Republicano de sacarla del cargo.
Una férrea defensa de sí misma y su familia manifestó la senadora Isabel Allende (PS) en el marco de la fallida compra por parte del Gobierno de la casa museo de Salvador Allende.
Flanqueada por históricos militantes del Partido Socialista y la actual presidenta de la colectividad, la congresista, hija del exPresidente, leyó el comunicado difundido ayer por la familia y aseguró que siempre actuaron de buena fe.
“Nunca esta familia se han visto envueltas en negocios, en conflicto de intereses, en lucros, en negocios, ni en nada”, aseguró la senadora, respecto de la fallida negociación que se acercó a los mil millones de pesos.
En ese sentido, apuntó con severidad al respeto que existe hacia su familia en Chile y el extranjero. “Creo que tenemos una dignidad que ha sido reconocida aquí y afuera. Muchas gracias”, sentenció.
Senadora Allende se defenderá de arremetida del Partido Republicano
La compra, que La Moneda canceló al reconocer que vulneraba la Constitución, terminó con la salida de la ministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval. Pero la oposición no quedó conforme y también apuntan sus dardos contra la titular de Defensa, Maya Fernández Allende, y la senadora Isabel Allende.
Al respecto, la legisladora dijo que si el Partido Republicano acude al TC pidiendo cesarla del cargo, “está en su pleno derecho” y que como familia también ejercerá su derecho a defensa.
“Para esto, entregamos un mandato al abogado Gabriel Osorio para que nos represente como familia. Así como ellos pueden ir al Tribunal Constitucional, para nosotros será el momento entonces también de que se conozcan los hechos”, señaló.