“Obviamente en esto uno puede ser general después de la batalla”, planteó la vocera de La Moneda.
“Vamos a la mancha”, lanzó Eduardo de la Iglesia durante una entrevista a la ministra Camila Vallejo en alusión al caso del exsubsecretario Manuel Monsalve, detenido durante este jueves tras una denuncia por violación.
En diálogo para Todo va a estar bien (VíaX), a un mes de conocida públicamente la denuncia, la vocera de gobierno contestó a si Monsalve debió salir del cargo el mismo día que el Presidente Boric supo la información.
Ante esa consulta, Vallejo contestó que la detención “da cuenta de que la ley está aplicándose para todos, sin distinción”, también destacó que “hay una investigación que está avanzando, no está estancada” y que “la instituciones del Estado están haciendo lo suyo”.
Luego, entrando en la pregunta concreta del periodista, Vallejo analizó: “cuando nos llegó la información a través de la ministra (Carolina Tohá), y luego del Presidente, se tomaron decisiones; hoy la crítica está en si esa evaluación tuvo que ser más rápida, pero se tomó una decisión”, la que “no fue sólo la denuncia, sino pedirle al Consejo de Defensa del Estado que analizara eventuales incumplimientos a la ley funcionaria (...) si es que exsubsecretario cometió delitos de otro carácter”.
“Obviamente en esto uno puede ser general después de la batalla”, reflexionó la ministra sobre la demora en concretar la denuncia. “El Presidente siempre dice que las cosas se pueden hacer mejor, pero acá no hay nada que no se haya hecho conforme a las exigencias de la ley”.
Vallejo y el “legado” del gobierno
“¿Este caso va a manchar el legado de este gobierno?”, le consultó De la Iglesia.
“Eso se evaluará cuando termine el gobierno, han habido muchos momentos difíciles y críticos”, declaró la funcionaria. “Este probablemente es uno de los más complejos, porque nadie espera que estas cosas pasen, en el lugar donde trabajas”.
“Pero lo importante es no sólo mirar las cosas que han sido problemáticas para el gobierno, sino también si hemos sido capaces de enfrentarlas sin dejar lado todas las otras cosas que tenemos por delante”, así que “lo peor que puede pasar es que nos paralicemos”.
“La evaluación que uno tiene que hacer sobre cómo enfrenta las crisis o dificultades un gobierno”, cerró, “es si deja de hacer lo que tiene que hacer o sigue logrando gobernar para la ciudadanía”.