Ignacio Achurra, director de División de Organizaciones Sociales: “La participación ciudadana es un antídoto contra la desafección”

Durante el mes de agosto, el Ministerio Secretaría de Gobierno, a través de la División de Organizaciones Sociales, estará conmemorando el Mes de la Dirigencia Social y Comunitaria con el lanzamiento de una serie de iniciativas que buscan apoyar la labor que cumplen las organizaciones sociales a lo largo del país.

El director del organismo, Ignacio Achurra, conversó con La Cuarta con respecto a esta conmemoración y destacó el rol que cumplen los dirigentes sociales. Además, detalló cómo la tecnología ha cambiado a las organizaciones y abordó la problemática de la desconfianza de la ciudadanía en las instituciones.

“Los y las dirigentes sociales cumplen un rol fundamental en la sociedad. Representan el interés de sus comunidades, de sus organizaciones, de sus territorios, y, además, en parte, del sistema democrático. Son un contrapeso en cuanto a sociedad civil a otros poderes que existen en las democracias, como son el poder político, el poder económico, los medios de comunicación”, partió detallando el también actor al diario pop.

“Y en ese sentido nosotros como gobierno tenemos un compromiso que nos ha señalado de manera muy clara el presidente Gabriel Boric, de hacer todo lo que está a nuestro alcance para entregar herramientas y potenciar el trabajo de las dirigencias sociales y comunitarias”, explicó Achurra.

El pasado 7 de agosto se celebró el Día del Dirigente, fecha que busca rememorar la creación de la primera ley en Chile de organizaciones sociales -particularmente de juntas de vecinos-, publicada originalmente en 1968.

“Este año en particular hemos querido hacer conmemoraciones y actividades durante todo el mes de agosto. Hemos estado lanzando una serie de anuncios que van en línea a mejorar las condiciones del trabajo y a responder a las necesidades que nos plantean las dirigencias sociales”, expresa el director.

En el marco de este mes, anunciaron tres importantes iniciativas para las organizaciones y sus dirigencias: el lanzamiento de la Red de Espacios para Organizaciones Sociales, el canal de apoyo legal para organizaciones junto a la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) y una guía práctica para la dirigencia social.

“Una de las necesidades que nos expresan permanentemente los dirigentes sociales es contar con espacios. No todas las organizaciones o las juntas de vecinos, tienen una sede propia. Entonces, hemos desarrollado una idea y ya la hemos puesto en marcha, que es crear una Red Nacional de Espacios para Organizaciones Sociales. Estos son espacios públicos, privados, o comunitarios que se adhieren a un sello que ponen en su lugar, espacios para organizaciones sociales, y pasan a formar parte de esta red para facilitar sus instalaciones para actividades de las organizaciones sociales, que pueden ser juntas de su asamblea, o actividades con las comunidades, o todo tipo de encuentros”, detalló el director sobre la iniciativa.

A través de la página web de la División de Organizaciones Sociales, podrán encontrar un mapa con todos los espacios disponibles. “La gente puede ir pasando por cada una de las regiones y ver cuáles son los espacios”, explicó.

Por otro lado, Achurra indicó que lanzaron un convenio con la Corporación de Asistencia Judicial para dar asistencia jurídica gratuita a los dirigentes sociales. “Muchos dirigentes tienen problemas relacionados con la renovación de sus directivas, problemas administrativos respecto a sus sedes, o necesitan hacer trámites, o hay algunos dirigentes sociales hoy en día, particularmente junto a vecinos, que de pronto son amenazados”, reveló.

“Hemos creado este canal de atención gratuita, que está disponible vía online en las 16 regiones del país, para que los dirigentes puedan hacer consultas, o incluso ser acompañados en procesos legales”, informó.

Con respecto a la tercera iniciativa, el director señaló que en el país existen más de 350 mil organizaciones inscritas en el Registro Civil. “Son muy diversas, van de organizaciones territoriales, como puede ser una junta de vecinos, clubes de adultos mayores, clubes deportivos, hasta organizaciones de consumidores, clubes de fans, organizaciones de trabajadores, etcétera. Y cada organización está afectada por ciertos marcos normativos, ciertos marcos legales, que no son los mismos en todas las situaciones”, comentó.

“Lanzamos una guía que explica desde cuál es el sentido de una organización social, qué tipo de organizaciones hay, cómo se crea, cuál es el rol de los líderes, cómo se puede ser un buen liderazgo, cuáles son las leyes que te afectan, cómo puedes acceder a recursos para el funcionamiento de tu organización social y generando patrimonio, cómo funcionan tus contrapartes municipales, de gobierno, etc”, explicó Achurra.

-Con respecto a la contingencia con todos los cortes de luz, ¿qué rol cumplen las organizaciones sociales en este tipo de emergencias?

-Las organizaciones sociales realmente operan como una verdadera red de protección social. Están vivas todo el tiempo. No existe probablemente una manzana en algún barrio en Chile que no tenga organizaciones sociales de todo tipo. Hoy día tenemos, estamos en un momento con mucha efervescencia de las organizaciones sociales, pero se vuelven aún más visibles cuando se producen emergencias.

“Me tocó estar en la región de Valparaíso en el verano recién pasado, a propósito de los incendios, y uno ve cómo inmediatamente las organizaciones sociales se convierten en comedores populares, empiezan a hacer acopio de materiales, albergan muchas veces en su propia dependencia a los vecinos”.

“En primer lugar, como están ahí en el tejido social, las organizaciones son siempre una primera respuesta. Estoy seguro que, y tenemos información de muchas juntas de vecinos hoy día que están con generador eléctrico ayudando a cargar los teléfonos de los vecinos, etcétera. Pero además, son el primer espacio, el primer eslabón de representación social. Las juntas de vecinos y las organizaciones de los barrios, como pueden ser hoy día también los comités de seguridad, lo que buscan son soluciones colectivas a problemas comunes. Cuando uno tiene un grupo de vecinos que tiene un problema, y que no es un problema personal, no es que solo ellos estén viviendo ese problema, hay otros vecinos que están en esa misma situación, la organización para representar ese interés frente a la autoridad, frente a la empresa, o potencialmente iniciar acciones legales, es muy importante”.

-Sobre las juventudes y las nuevas generaciones, ¿de qué manera se organizan? ¿A qué tipo de organizaciones pertenecen?

-Esto es super interesante, porque cuando uno piensa en organización social, piensa más tradicionalmente. Pero hoy día los jóvenes se están organizando de maneras muy distintas y las redes sociales cumplen un rol muy fundamental en esto. Hay organizaciones de jóvenes que solo funcionan en el espacio público digital, que nunca llegan a encontrarse en el espacio público material. Que se organizan en torno a gusto, a necesidades, a causa de activismo medioambiental, animalismo. Y también muchas que se convocan en las redes sociales para encontrarse en el espacio público.

“Las organizaciones de jóvenes son muy diversas, van desde activismo medioambiental, causa social, organizaciones de mujeres, hay organizaciones de jóvenes que se juntan a pelear con espadas medievales, hacer cosplay, organizaciones de gamers, organizaciones de otaku, organizaciones de jóvenes que se juntan a bailar k-pop. Son muy diversas y ahí nosotros como institucionalidad pública tenemos un desafío, porque la forma que nosotros ofrecemos de organizarse, no siempre como que hacen match con la forma de organizarse los jóvenes. Son formas mucho más transversales, más horizontales. Entonces, si tú les pides que tengan un presidente, un tesorero, un secretario, un acta de reunión, te van a decir ‘eso no tiene nada que ver con la forma en que nosotros nos organizamos’. Y por eso es que nosotros hemos estado investigando, acercándonos, y poniendo un foco en la forma de organización juvenil porque creemos que hay mucho que hacer para poder ofrecerles a esas organizaciones un camino de formalización y una contraparte pública que sea coherente al tipo de formas en las que se organizan.

-¿De qué manera cambian las organizaciones con la llegada de la tecnología?

-Es innegable que la aparición del internet y del mundo digital ha revolucionado la forma de relacionarnos entre las personas. Hoy día nosotros podemos estar conectados y un joven puede estar jugando online y estableciendo contacto, conversando con un joven en Corea, en Holanda, o en Chiloé. Y esas nuevas formas de relacionarnos también han impactado en las formas que nos organizamos. Por eso es que yo diría que ha habido una verdadera revolución en las formas de organizarnos, de comunicarnos. Nuevamente, las instituciones del Estado, los gobiernos, tenemos que ir adaptándonos a esas formas para que esos mundos, particularmente de jóvenes, también encuentren una interlocución y respuestas en el Estado. Porque eso también nos da la garantía de que se sientan parte del sistema, del sistema democrático. Sientan que su voz, sus ideas, efectivamente son consideradas. Eso hay que hacerlo, y hay que hacerlo con mucha decisión.

-Actualmente, ¿cuáles son los principales desafíos que enfrenta la División de Organizaciones Sociales?

-Nosotros tenemos básicamente tres misiones como institución. Una es hacer comunicación territorial de las políticas de interés público. Estamos en el Ministerio Secretaría General de Gobierno, y estamos todo el día desplegados en terreno con nuestro equipo, acercando los servicios públicos. Hacemos ferias de servicios públicos con Registro Civil, con el Servel, Clave Única, Banco Estado, acercando los servicios públicos a la ciudadanía para que la gente pueda resolver y hacer sus trámites de manera mucho más fácil y expedita.Y estamos entregando información sobre las políticas públicas de interés social.

“Además, trabajamos con las organizaciones sociales entregando herramientas. Tenemos muchos cursos, estamos todo el tiempo formando en diferentes materias la organización social para potenciar su labor. Promovemos y trabajamos en la aplicación de mecanismos de participación ciudadana, es decir, buscamos que la democracia sea algo más que ir a elegir representantes cada dos, tres, o cuatro años. Sino que existan mecanismos de consulta, de plebiscito, de mesas de trabajo, para que la ciudadanía interesada en ciertos temas, las organizaciones sociales expertas en ciertos temas, se involucren en los espacios de diseño y ejecución de política pública. Por ejemplo, si se va a hacer una política pública en materia de cuidado, es importante que las organizaciones del mundo del cuidado participen. Lo mismo con las organizaciones de trabajadores, con las organizaciones de consumidores, etc.”.

“Yo diría que uno de los grandes desafíos que nosotros tenemos es llegar a esta otra forma de organización que existen particularmente de los jóvenes, ser capaz de ofrecerles una posibilidad de hacerse parte del debate democrático, institucional, y permitir de que esas voces, esas nuevas ideas, esas nuevas formas de ser y hacer de los jóvenes también incidan en la construcción de política pública, en la definición de las políticas que que nos afectan en el día a día a las personas, que nos mejoran nuestro cotidiano, nuestra vida”.

-Hablando con respecto a la participación ciudadana, en estos días existe cierta desconfianza hacía las instituciones y la política. Como gobierno, ¿de qué manera pueden enfrentar esta problemática? ¿Cómo darle la confianza a la gente para que participe en estos espacios?

-Yo creo que es clave dar respuestas concretas. Por eso cuando los dirigentes nos dicen que necesitan apoyo legal, nosotros decimos ‘tenemos que ser capaces de habilitar un sistema de apoyo legal gratuito y permanente para los dirigentes’. Lo mismo sucede con los espacios. Los dirigentes sociales lo que necesitan es darle respuesta a sus organizaciones. Y ahí nosotros tenemos que dar respuestas muy concretas, pero también tenemos que visibilizar a las organizaciones. Una de las cosas que buscan mucho es hacer visible, que sepan que existen. Porque en la medida que tú sabes que existen, las incorporas como actores políticos en el debate público. Si tú sabes que hay una organización de cuidadoras, las llamas, las haces parte del debate respecto a la política de cuidados. Si tú sabes que hay organizaciones de jóvenes gamers, los puedes incorporar para discutir y debatir sobre la demanda que tiene ese mundo, que los E-Sports sean considerados también deporte. Entonces, el visibilizar, el reconocer, el valorarlos como actores políticos, como contraparte, también es algo que la ciudadanía exige.

“Yo creo realmente que la participación ciudadana es un antídoto contra la desafección. Cuando uno se siente incorporado, cuando se siente escuchado, uno se siente parte de un sistema y lo deficiente. Si las personas no se sienten acogidas por la democracia, empiezan a desconfiar de las instituciones y por eso es tan importante la participación ciudadana, porque legitima también la decisión que va tomando el sistema político en conjunto con la ciudadanía”.