La historia del “Viejo del saco” que asesinó y abusó de menores aterrorizando a Chile en los 50

Francisco Varela Pérez durante la reconstitución de escena. Imagen publicada por "Las Noticias de Última Hora".
Francisco Varela Pérez durante la reconstitución de escena. Imagen publicada por "Las Noticias de Última Hora".

Francisco Varela Pérez fue uno de los “monstruos” que cometió algunos de los crímenes más desgarradores ocurridos en el país, dejando un número de víctimas aún indescifrable y alimentando una leyenda.

A inicios de enero, el youtuber y escritor Álvaro Matus publicó el libro Psicópatas chilenos, donde presenta los casos más espeluznantes del true crime de nuestro país, el primero de ellos, es el del llamado “Viejo del saco”.

Francisco Varela Pérez era un vagabundo de 52 años que nació en Coquimbo y protagonizó una de las historias criminales más dolorosas de la década de los 50: confesó haber violado a docenas de menores y mujeres.

El hombre reconoció que cuando bebía, abusaba de uno a dos menores al mes, mostrando completa frialdad y psicopatía. El principal detalle que ayudó a las autoridades a dar con el paradero del también llamado “Monstruo de Carrascal”, fue que no usaba su mano derecha.

Pudo ser capturado por los rastros en el cuerpo de una víctima y la declaración de un joven que logró salvarse de un ataque del hombre.

Francisco Varela Pérez
Francisco Varela Pérez. Imagen divulgada por "Las Noticias Gráficas".

El último crimen

En 1950 Santiago comenzó un periodo de urbanismo, aunque seguía la pobreza y habían muchos indigentes. El 16 de abril de 1954, Varela llevó a cabo su último crimen, la víctima fue un niño de solo 6 años, identificado como Luis Gastón Vergara Garrido, conocido por todos como Luchito.

La Policía encontró el cuerpo del menor semidesnudo, al interior de una habitación abandonada. Difundieron un dibujo del niño en los diarios y varios vecinos lo reconocieron, ayudando con sus declaraciones. Ese día Luchito se había escapado de su casa tras una pelea de sus padres.

“Su ropa contenía uñas, canas y otros rastros de ADN. Concluyeron que era un hombre de unos 50 años, aproximadamente, robusto y que tenía una particularidad: solo usó el brazo izquierdo durante el ataque”, informan en el canal de YouTube del Poder Judicial de Chile.

La Policía de Investigaciones detuvo a 40 indigentes del barrio Carrascal, en Quinta Normal, y los interrogaron para saber “si eran zurdos, si se cortaban las uñas”.

Francisco Varela Pérez
Francisco Varela Pérez

La muerte del “Viejo del saco”

Pero justo en medio de la investigación, un joven de 17 años identificado como José Aguilera, denunció un intento de violación por parte de un hombre con aspecto de vagabundo que no usaba la mano derecha. Se comenzó la búsqueda en la zona de Carrascal hasta dar con Francisco Varela Pérez.

Fue sometido a exámenes de ADN y un interrogatorio que duró tres días. “Lo vieron tan borracho que le dieron vino para que no entrara en shock. En un comienzo negó los hechos, pero después confesó que había violado al menos a 20 personas”, incluyendo niños y mujeres.

Justificó sus delitos sexuales diciendo que las mujeres no se fijarían en él por su aspecto, y que por eso buscaba a niños vulnerables. También confesó violar entre uno y dos niños por mes, pero nunca se pudo determinar el número real de sus víctimas, ya que se cambió de ciudad muchas veces.

Tras dos años de juicio, el también llamado “Vampiro negro” o “Chacal de Carrascal” fue sentenciado a pena de muerte. “Uno de los más despiadados criminales de la historia policial chilena, eternizando la leyenda del viejo del saco”.

"Las Noticias de Última Hora".
Varela durante la reconstitución de escena. Imagen publicada por "Las Noticias de Última Hora".

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