Ilse Sepúlveda, funcionaria de Gobierno, fue acusada por la denunciante de amedrentarla. En su declaración ante Fiscalía admitió que pudo haberle dicho que se fuera del país.
La periodista Ilse Sepúlveda, funcionaria del Ministerio del Interior, reconoció haber ido a visitar a su compañera de labores que acusó de violación al exsubsecretario Manuel Monsalve.
Hace unos días se supo que la presunta víctima y su familia señaló a Sepúlveda como responsable de amenazas veladas, luego que le contara lo ocurrido con Monsalve, días antes de estampar la denuncia. Le habría hablado, en tono “amenazante”, de eventuales “atropellos” en la calle y de salir del país.
Diario La Tercera accedió a la declaración de la profesional ante Fiscalía y allí admitió parte de lo anterior. Aseguró que lo hacía a modo de ayuda, pues era su amiga.
“Yo le pude haber dicho que se fuera del país, pudo haber sido así, le estaba dando opciones para que estuviera mejor o dándole posibles soluciones porque ella no quería denunciar, estaba muy asustada”, afirmó.
Le sugirió “hacer una nueva vida en otro lugar”
Ilse Sepúlveda dijo que fue idea de ella ir a visitarla a su casa, pero -de acuerdo a fuentes del citado medio- existirían dudas sobre si pudo haber sido enviada desde el entorno de Monsalve para interceder. La siguiente declaración habría encendido sospechas, al sugerirle una “negociación” e incluso, irse a “otro lugar”.
“Recuerdo que le dije que podía negociar con la otra parte, porque como ningún de los dos recordaba nada de lo ocurrido esa noche, según lo que había comentado días antes, ver opciones de hacer una nueva vida en otro lugar. O ver opciones con su familia, eran ideas que se me venían como para ayudarle, ya que yo la veía muy mal”, declaró.
De acuerdo a los antecedentes de Fiscalía, minutos después de esa conversación habrían llegado funcionarios de la PDI a la casa de la denunciante, haciéndose pasar por repartidores, con la intención de contactarla. Esto, bajo supuestas órdenes de Monsalve.
Más aún, esos dos hechos, el diálogo con Ilse y la extraña “visita” de efectivos policiales habrían terminado por convencer a la víctima de denunciar todo ante el Ministerio Público.