Natividad, de 22 años, perdió el control tras revisar el Facebook del padre del niño.
Un impactante parricidio remeció al país durante la tarde del 11 de julio de 2012, hace casi 12 años.
Se trata del crimen cometido por Natividad Otárola, una joven de 22 años que le quitó la vida a su hijo Jordan, de apenas 4, en la comuna de Las Condes.
Según información policial, fueron los abuelos del niño quienes se percataron del ataque tras escuchar desgarradores gritos desde una pieza continua. En una habitación del hogar, hallaron a su hija y a su nieto tendidos en una cama.
El motivo del parricidio
Con el correr de la horas, se darían a conocer fuertes detalles del parricidio que ya conmocionaba a la opinión pública.
De acuerdo a los antecedentes revelados, Otárola Sáez se autoinflingió heridas, por lo que debió ser trasladada de urgencia Hospital El Salvador.
Sin embargo, el detalle más escalofriante lo dio a conocer Carabineros: Natividad Otárola cometió el crimen contra su hijo cegada por los celos, después de leer una conversación por Facebook de su pareja con otra mujer.
“A través de las redes sociales, de Facebook específicamente, había visto algunas cosas que la hacían pensar que su pareja la estaba engañando. Este señor vino al domicilio, tuvieron una discusión. Posteriormente esta joven ingresa a la casa, dice la mamá que muy mal anímicamente”, comentó el mayor Patricio Moreno.
Además, la policía apuntó a un presunto cuadro de depresión de la mujer, quien horas antes de cometer el hecho publicó en las redes sociales un mensaje para su hijo:
“Hijito mío, te amo mucho, eres lo más lindo que la vida me pudo haber regalado. Hay cosas que por ahora no entenderás, pero sólo ten presente que todo lo que haga es para que estés mejor y por tu bienestar. Te adoro mi chiquitito, mi bello... mi tesorito”.
Horror
La desgracia se produjo al interior de una casa del pasaje Denev, en la villa Vía Láctea, en el sector de Nueva Bilbao.
Después de atacar al pequeña con un cuchillo cocinero, la mujer intentó suicidarse, provocándose cortes en distintas partes del cuerpo.
Sin embargo, la victimaria no consiguió su objetivo. Los hechos fueron descubiertos por los padres de la mujer, quienes quedaron choqueados al ver la terrible escena: la mujer se encontraba agónica y con el cuchillo en su mano derecha, mientras que el menor estaba frío, con al menos cuatro puñaladas en el pecho y el cuello.
El mayor Patricio Moreno, jefe de la 47ª Comisaría de Los Dominicos, confirmó que en el lugar de los hechos fueron encontradas cartas de Natividad. ¿Qué decían las misivas? Se dejaba entrever un profundo estado de tristeza y la promesa de estar siempre junto a su hijo.
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