Maite Orsini, diputada: “Al hater que me insulta por Twitter, ¡amigo, no te leo!”

Contenta se encuentra la diputada del Frente Amplio, Maite Orsini (36). Solo han pasado algunas horas desde que la Cámara Baja aprobara por unanimidad, el proyecto que ha impulsado y que sanciona la violencia digital. En ese contexto, nos recibe para contestar el cuestionario de La Cuarta, en donde aborda algunos aspectos de su vida, aunque prefiere pasar de sus relaciones amorosas.

Entre sus respuestas la diputada explica su relación con las redes sociales y cómo hace frente al odio que recibe desde estas plataformas, pero también se da espacio para confirmar que, por ahora, su intención es continuar un periodo más en la Cámara Baja y no postularse al Senado, como había informado en un principio. Acá una selección de “Historias sin comprimir”, que puedes revisar completo en el canal de YouTube del Diario Pop.

¿Cuál es el día más feliz de su vida?

¿Pueden ser dos? Uno político y uno personal. Político, el día en el que el Presidente Gabriel Boric ganó su elección, fue un día muy emocionante desde muchos puntos de vista. Era la concreción de un sueño por el que yo vengo trabajando desde que tengo veintipocos años. Verlo ganar esa elección, sumado a que yo tengo mucho afecto por la persona de Gabriel, es amigo mío, lo quiero mucho. Ver que alguien que yo quiero mucho, que aprecio mucho, que respeto y valoro mucho, logra ser Presidente de Chile, sumado a lo que él representa. Fue un día muy muy emocionante y muy importante. Ahora, en lo personal, hay un día que recuerdo muy bien, esto es una tontería, pero es que me dio tanta felicidad que no se me ocurre otro día. No sé si acuerdan, por ahí por el año 2010-2011, que estábamos jugando el campeonato nacional y teníamos que jugar la final contra la Católica. Hoy día me cambié, ahora soy hincha del Palestino, pero en ese momento era hincha de la U y teníamos que ganarle a la Católica por una diferencia de goles como de cuatro goles, porque ellos nos habían ganado primero dos cero y llegaron con cotillón, de hecho, el evento se llama “El cotillón”. Llegaron con cotillón al estadio celebrando y metimos los cuatro goles y me dio una felicidad tan grande, que yo creo que ese es el mejor día de mi vida.

¿Y el día más triste?

Lo que primero que se me viene a la cabeza es el 4 de septiembre, el día que perdimos el plebiscito de salida de la primera Constitución, que la verdad y sin vergüenza era la Constitución de mis sueños. Era una Constitución muy bonita, justa, pero era sobre todo el cierre de un proceso que yo pensé que iba a ser un proceso transformador y haber perdido ese plebiscito fue muy doloroso. También tenía en esa Convención afectos importantes de personas que le dedicaron mucho tiempo, corazón, cariño y que estaban muy frustradas en lo personal también. Entonces me dolió acompañar a esas personas, me dolió sentir que estábamos defraudando un poco a la ciudadanía que se movilizó en el 18 de octubre. Fue un día muy triste, muy oscuro.

¿Tiene tiempo para ver series? ¿Alguna que recomiende?

Soy muy buena para las series, tengo la pésima costumbre de quedarme dormida viendo series. Me cuesta mucho conseguir el sueño si no estoy viendo una serie, así que generalmente veo un capítulo diario de alguna serie. Voy a matar dos pájaros de un tiro, voy a recomendar una serie y voy a hablar de mi trabajo. Quiero recomendar la serie Bebé Reno. No sé si la vieron, es una serie que tiene un guion maravilloso, actuaciones increíbles. Y se trata de una mujer que hostiga y acosa a un hombre. Después se hizo una entrevista a la mujer real, porque es una historia de la vida real y es impresionante cómo la actriz principal logra captar los movimientos, los gestos de la persona real. ¿Y cómo lo mezclo con mi trabajo? Este caso se trata de una mujer que hostiga y que luego, perdón por el spoiler, pero es condenada por esto. Y en Chile eso no podría ocurrir, porque en Chile no existe el delito de acoso o de hostigamiento y justamente estamos trabajando en impulsar una ley sobre violencia digital. Entonces creo que esa es una serie importante para ver y que ayuda a entender un poco qué es lo que hay detrás de estas formas de violencia y cómo puede afectar gravemente la vida de una persona.

¿Tiene alguna red social favorita?

Sí, la verdad es que Instagram, es la red social que yo manejo como en términos más personales. Soy muy mala para Facebook. El Twitter me parece que es pura violencia, generalmente lo uso como unilateralmente, tuiteo y lo cierro. No miro, no miro, no hago feedback, no hago comunidad a través de esa red social. TikTok me encanta, pero estoy muy vieja para eso todavía, no logro bien saber cómo se suben los videos, me cuesta entenderlo. Instagram es de todo mi agrado, me gusta. Lo que más me gusta es que hace como desaparecer las distancias de tiempo y de lugares. Uno va dejando en el feed las cosas más importantes que hizo durante el día y genera mucha comunidad. He conocido por ahí a personas súper valiosas, estoy constantemente contestando los mensajes, las publicaciones y es una red súper buena onda, amigable, y útil para mi trabajo.

¿Cómo enfrenta el hate de las redes sociales?

Twitter no lo leo. Yo no leo Twitter, así que al hater que me insulta por Twitter, ¡amigo, no te leo!. No pierdas tu tiempo. En Instagram, cuando recibo mensajes como de odio bien terrible bloqueo y después ya no recibo más hate de esa persona. Y cuando son críticas a mi trabajo o a ciertas decisiones que yo tomo, trato de convencerlos, desde mi punto de vista, en general les contesto esos mensajes y trato de persuadirlos. Extrañamente en muchas ocasiones la gente termina diciéndome ‘oh, sí, tienes razón, perdón por el hate’ y como que se retracta.

¿Alguna película que la haya marcado?

Sí, me voy a quedar en esta oportunidad con La Memoria Infinita, de la tremenda directora y tocaya, además, Maite Alberdi.

¿Algún libro?

Me gusta mucho la lectura, ¿puede ser dos también? Primero voy a recomendar un un escritor chileno, Benjamín Labatut, escribió dos libros muy buenos, Un Verdor Terrible y Maniac. Pero me voy a quedar con el Verdor Terrible, me gusta porque hace de un espacio que es tan hostil como la ciencia un lugar entretenido para poder inmiscuirse. Y ya, es que leí uno hace poco que me gustó demasiado, pero es una novela un poco cursi, pero está demasiado buena que se llama Aquitania, es una novela sobre una de las tantas mujeres olvidadas por la historia. Es una mujer francesa que tiene la destreza de haber sido reina de Francia y de Inglaterra y de haber parido los herederos al trono de ambos países. Y es una mujer que está muy olvidada por por la historia, pero que las historiadoras le llaman como la abuela de Europa y es una mujer muy power. Y este libro cuenta sus primeros 20 años de vida. Está muy muy bueno, muy entretenido, de suspenso, te agarra, no lo puedes a soltar.

¿Algún grupo o cantante favorito?

Soy fanática de Charly García, de hecho nombré a mi perrito con su nombre, se llama Charly García, así lo inscribí con su chip, porque soy muy fanática de Charly. En general me gusta el rock argentino de los 80, es lo que más escucho, pero Charly es the best.

¿Por qué decidió ser diputada?

Creo que es la mezcla de dos condiciones intrínsecas a mí persona. Primero siempre tuve desde muy chiquitita una vocación de servicio importante. Esto también es muy perno, pero fui desde muy chica scout y en los scouts el servicio era un pilar súper importante. Desde muy chica tuve mucha inquietud por lo social. Fui voluntaria de bomberos, ingresé a una compañía de bomberos también muy movida por este espíritu de servicio. Y eso se mezcla con que tengo un problema de intolerancia severa frente a la injusticia y entré a estudiar derecho a mis 18 años y me fui dando cuenta de que tenemos una institucionalidad que es muy injusta, muy segregadora. La desigualdad es muy grande, y me di cuenta estudiando nuestras leyes. Y mientras estaba estudiando vinieron las movilizaciones del 2011. Yo estaba en la Universidad y me movilicé junto a mis compañeros y tenía algunos compañeros que estaban formando Revolución Democrática. Algunos años después tocó enfrentar la primera elección, la segunda, porque yo entré a militar para la campaña de Giorgio Jackson y ganamos esa elección. Y luego, cuatro años después tocó enfrentar de nuevo un proceso, era importante que pudiésemos tener más diputados y diputadas en el Parlamento, era importante que mujeres con electividad pudiesen estar disponibles a ser candidatas, así que sentí la responsabilidad de hacerlo. Y lo hice por suerte, porque me hace muy feliz.

¿Qué es lo más difícil de ser diputada?

Lo más difícil es que las facultades que tenemos para hacer esas transformaciones no son facultad parlamentaria. Nosotros no podemos presentar proyectos de ley que cuesten recursos públicos. ¿Qué proyecto no cuesta recursos públicos? La verdad es que es muy acotado. No podemos presentar proyectos de ley que toquen los derechos sociales, por ejemplo, pucha que me gustaría tener un posnatal de un año, seis meses para el hombre, seis meses para la mujer y que los padres pudiesen estar en el primer año de la vida de sus hijos. Tampoco para modificar el sistema de pensiones ni para modificar el sistema de salud. La gente espera mucho de uno. La gente que te eligió como representante, espera que que las ideas que que uno ha llevado a la calle las pueda transformar en realidad en el Parlamento y la verdad es que no se puede. No solamente no tengo la facultad parlamentaria para hacerlo, sino que además no tengo los votos. Entonces es súper frustrante como trabajar, trabajar, trabajar por lo que uno cree y no poder responderle a las personas que te votaron.

¿Y lo más satisfactorio de ser parlamentaria?

Ya, es que voy a decir algo muy perno de nuevo, que a mí me encanta las leyes. Yo soy abogada de profesión, me gusta mucho estudiar, soy súper estudiosa, de hecho nunca dejé de estudiar, sigo estudiando, estoy estudiando un magíster en la Universidad Alberto Hurtado, me gusta mucho estudiar y me apasionan las leyes, entonces me gusta mucho estudiarlas y disfruto mucho las comisiones. Por otro lado, me gusta mucho también el trabajo en el territorio, estar con organizaciones de la sociedad civil, con juntas de vecinos, con clubes de adulto mayor, ayudándolos a empujar sus proyectos, recibir el abrazo, sobre todo, de las mujeres adultas mayores, me gustan los abracitos, son muy reconfortantes.

¿Tiene pensado en postularse al Senado?

Yo estoy en mi segundo período parlamentario, por ley son tres periodos parlamentarios como como máximo, por lo que me queda un periodo todavía como diputado en la Cámara, estoy trabajando hartos proyectos de ley a largo plazo, la verdad es que una ley para desde que una la presenta hasta que ve la luz, toma mucho tiempo. Por ejemplo, el proyecto de violencia digital que hemos estado impulsando con mucha fuerza, lo presentamos en el año 2020 y recién ayer se votó en la sala y todavía falta toda la tramitación en el Senado y un eventual tercer trámite. Entonces es largo y hay proyectos en los que creo mucho y tengo el compromiso de de seguir empujando, para lo que me falta algo de tiempo. Creo que todavía falta mucho tiempo, pero pueden pasar muchas cosas, pero por ahora mi intención es mantenerme un periodo más en la Cámara Baja para poder cerrar todos esos proyectos. No tengo intención alguna de ir al Senado.

¿Qué proyecto le gustaría que se aprobara ya?

Sin dudar la reforma de pensiones. Creo que es urgente que podamos generar una legislación que mejore la calidad de vida de los adultos mayores. La jubilación debiese ser eso, un espacio de júbilo, un espacio en donde se pueda descansar, disfrutar de la vida y la verdad es que con las pensiones que entrega el sistema de AFP no alcanza. No alcanza ni para lo más mínimo, no alcanza para alimentarse bien, no alcanza para resguardarse del frío, no alcanza para pagar los medicamentos costosos. Y no puede ser que los adultos mayores de nuestro país que trabajaron toda su vida para levantar Chile, tengan que pasar la vejez con miedo de no llegar a fin de mes. Eso me duele mucho y lamento muchísimo que en todo este tiempo no hayamos sido capaces de generar un acuerdo que permita subir las pensiones de los adultos mayores.

¿Hay alguna figura de otro sector político que valore?

La verdad es que bastantes. Soy de quienes piensa que todos cabemos en nuestro país, que todas las ideas son importantes, yo defiendo las mías, pero también defiendo que todas puedan defender las suyas y me gusta poder conversar con las personas del otro lado para entenderlas. Pero no voy a mencionar a nadie al que le tenga aprecio por amistad, voy a mencionar a una diputada de mi distrito, de la vereda del frente, que valoro mucho por su trabajo, que es la diputada Erika Olivera, que ha dado una lucha incansable por las deportistas de nuestro país y los deportistas, pero particularmente por las mujeres deportistas. También es una diputada con la que se puede conversar, con la que se puede llegar a acuerdos y hemos empujado juntas, a pesar de de estar en veredas distintas, varios proyectos de ley que van en apoyo directo a las mujeres. Y la agenda de género y de diversidades sexuales, es una agenda en la que podemos compartir y podemos empujar cosas juntas y eso no se ve con con todo lo de aceptar

¿Cuál cree que será el legado del gobierno de Gabriel Boric?

Espero que sea la reforma de pensiones, pero por ahora creo que lo más trascendental que ha hecho este gobierno es la agenda de seguridad. Somos el gobierno que más proyectos en materia de seguridad ha despachado y el que más recursos públicos ha dedicado a fortalecer nuestra institucionalidad en materia de seguridad. Y dentro de esa agenda creo que la creación del Ministerio de la Seguridad va a ser un legado importante del gobierno del presidente Gabriel Boric.

¿Cuál su visión del nuevo partido Frente Amplio?

Me entusiasma mucho que hayamos formado el partido Frente Amplio. No puedo ignorar que hay una pequeña espinita en mi corazón, porque yo casi toda mi vida adulta dedicada a la formación de Revolución Democrática, mis amigos, mis afectos, mis convicciones, mis tiempos libres, le dediqué tanto, tanto, que igual me duele como guardar la banderita verde, un poquito, pero entiendo que que es lo correcto, que lo que corresponde, que no hay ningún sentido para que estemos divididos en tres partidos, porque la verdad es que es demasiado más lo que nos une que lo que nos divide y nuestro sistema electoral beneficia la unidad y castiga la dispersión. Entonces, era la manera más inteligente de enfrentar los futuros desafíos políticos.

¿Algún mensaje a los lectores de La Cuarta?

Le diría a quienes nos están viendo que sean cortés, que anden con cuidado, que se eduquen lo más posible, que respeten para que los respeten y que Dios nos ampare (risas).