Los diálogos previos al encuentro entre la denunciante y el subsecretario se dieron a través de esa aplicación de mensajero.
A través de la aplicación Signal, el pasado 21 de septiembre, el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, le habría enviado un mensaje a una funcionaria de la misma cartera para concertar un encuentro que, según se reveló durante el miércoles, terminó en una acusación de violación.
Tras la denuncia presentada ante la Policía de Investigaciones (PDI), esta quedó a cargo quedó el fiscal regional Centro Norte, Xavier Armendáriz, quien ordenó la incautación del teléfono de Monsalve para realizar peritajes, instancia en que se observó que “número de seguridad con Manuel Monsalve ha cambiado, probablemente porque ha reinstalado Signal o cambiado de dispositivo”, agregó en la denuncia, según consignó La Tercera.
El denuncia contra Monsalve fue presentada el pasado 14 de octubre y, según la misma, los mensajes durante la conversación se borraron cada 30 segundos.
El subsecretario renunció y fue reemplazo por Luis Cordero, antes ministro de Justicia.
Qué es Signal
Siendo lanzada en el 2016 su versión de escritorio, Signal es una aplicación que permite enviar mensajes encriptados y programados para desaparecer en un tiempo determinado (hasta en 5 segundos). Aquel detalle es complejo en la investigación, ya que dificulta el acceso a los diálogos entre la denunciante y el exfuncionario público, quien renunció a largo durante este jueves.
La revisión de esta plataforma también estuvo entre las diligencias para la investigación contra Héctor Llaitul, desde la que se revelaron conversaciones encriptadas extraídas de su aparato móvil, según consignó BioBíoChile.
Según recoge el medio Deutsche Welle, dicha app es desarrollado por una fundación sin fines de lucro y que se financia con donativos.
Ahora, Signal nuevamente cobró relevancia en una investigación, esta vez contra Monsalve por una denuncia de violación, cuyo teléfono también fue sometido a peritajes.
A estar todos lo mensajes completamente encriptados, ni siquiera los propietarios de Signal pueden monitorearlas, sólo quienes formaron parte del diálogo.
En cuanto a su uso, esta app funciona similar a plataformas como WhatsApp y Facebook Messenger, con funciones como envío de fotos, mensajes individuales, grupos, “stickers”, transferencia de archivos, llamadas de voz e incluso videollamadas. Además, pueden realizarse chats grupales con hasta mil integrantes y llamadas compuestas hasta por ocho personas.
Si bien las conversaciones de la app son privadas, no gozan de anonimato, ya que para inscribirse se requiere del número telefónico, aunque nada más.