El gobernador Claudio Orrego enfatizó que “una delincuencia 2.0 necesita un Estado 2.0, y para eso tenemos que dotarnos de la mejor tecnología disponible”.
Recientemente, el gobernador de Santiago, Claudio Orrego, solicitó al Ejecutivo que las policías puedan utilizar pistolas Taser para enfrentar la crisis de seguridad que enfrenta el país.
Según declaró en un comunicado, “una delincuencia 2.0 necesita un Estado 2.0, y para eso tenemos que dotarnos de la mejor tecnología disponible en el mundo”.
“Es bastante incomprensible que hoy tengamos la autorización para tener armas letales, como son las armas de fuego, pero que todavía no se haya implementado en Chile, la posibilidad de tener estos dispositivos que no son letales, por no tener autorización administrativa”, recalcó la autoridad.
En esta línea, agregó que tienen la convicción de que “para resolver los problemas de seguridad que tenemos en Santiago y en el país, tenemos que avanzar con sentido de urgencia en la adopción de esta tecnología”.
“Hacemos un llamado al Ejecutivo a que con sentido de urgencia lo apruebe para que nuestros policías tengan algo que vaya entre la luma y la pistola. Un dispositivo Taser, es una de las alternativas existentes y, llegó el momento de aprovecharla en nuestro país”, sentenció Orrego.
Qué son las pistolas Taser y cómo funcionan
Se trata de un arma no letal que se presenta como una alternativa media entre el bastón retráctil y las armas de fuego, afirmaron en el comunicado.
En este sentido, agregaron que incluyen un registro audiovisual que permite resguardar tanto a los funcionarios policiales como a la ciudadanía.
Desde el Gobierno de Santiago aseguraron que esta herramienta ya es utilizada en procedimientos policiales de países sudamericanos como Colombia, Brasil y Argentina.
Las descargas eléctricas que emiten —a través de dos dardos conectados por cables— paralizan a los objetivos en un rango que suele estar por los cinco segundos, aproximadamente.
Generalmente, son consideradas como una alternativa para detener a delincuentes o sospechosos sin llegar al uso de armas de fuego.
El teniente de Carabineros, Camilo Castro, había explicado a T13 en septiembre de 2019 que lo que generan “no es un dolor”, sino que más bien “es una contracción muscular que imposibilita que uno se pueda mover”.