El viernes pasado, detectives de la Brigada de Homicidios Temuco detuvieron a un sujeto acusado de asesinar a su pareja embarazada.

De acuerdo a los primeros antecedentes, el hombre habría intentado hacer pasar la muerte por un suicidio, siendo descubierto tras los peritajes de los detectives y peritos del Laboratorio de Criminalística.

En medio de las diligencias, los expertos determinaron que la lesión cervical que presentaba la víctima no era concordante ni definía concretamente una acción suicida.

Al respecto, el prefecto Luis Garrido, jefe de la Prefectura Provincial Cautín, dio a conocer que “bajo la dirección de Ministerio Público, el proceso investigativo se inicia el día 22 de mayo, ocasión en que se efectúa una concurrencia a un sitio de suceso por parte de la Brigada de Homicidios a una vivienda ubicada en el campamento Los Álamos, donde se constata el hallazgo de una mujer adulta quien, de acuerdo al escenario que se visualizaba, se determinaba a priori una asfixia por ahorcamiento”.

Nuevos antecedentes

Según detalló BioBioChile, el pre informe del Servicio Médico Legal expuso que “había signos compatibles con una estrangulación”.

En cuanto al acusado, fue identificado con las iniciales P. L., pareja de Lhoy Sazo (34) y con quien ya tenía un hijo. De acuerdo al citado medio, el sujeto reconoció que, horas antes del crimen, había peleado con la mujer.

En cuanto a la escena del crimen, se dio a conocer que la mujer fue hallada en cuclillas y con un cable de televisor rodeando su cuello.

Si bien, en principio, se creyó en el suicidio, ciertas pistas alertaron a la PDI. Por ejemplo, se concluyó que el nudo realizado no era suficiente para sostener el peso de una persona. ¿Otro detalle? Las uñas de Lhoy tenían sangre, un claro signo de defensa.

Declaró el imputado

Según precisó RBB, en su declaración, P. L. confirmó una discusión con su pareja. “Tú sales y te gusta huevear. Cuando yo quiero, no quieres”, le habría dicho el sujeto a la mujer. Además, el imputado reconoció que tomó del cuello a la víctima.

“Las declaraciones prestadas por el imputado son coincidentes con que aquí lo que ocurrió fue que hubo una estrangulación manual, se provocó la muerte a la víctima, y luego se intentó encubrir el delito con este pseudo-suicidio”, indicó el fiscal Jorge Mandiola.

Con estos y otros antecedentes, el tribunal decretó la prisión preventiva del sujeto, quien figura como imputado por el delito de femicidio y aborto violento.