Nuevo remezón en la Fiscalía, a raíz de los chats del abogado Luis Hermosilla. Ahora, los dardos apuntan a quien fuera fiscal del Caso Penta.
El Ministerio Público confirmó la apertura de una investigación penal en contra el exfiscal Manuel Guerra, quien fuera designado persecutor del Caso Penta en sus últimas etapas.
Y es que en medio del escándalo por el Caso Audio, se descubrieron chats entre Guerra y el cuestionado abogado Luis Hermosilla, justo cuando se investigaba el bullado caso de financiamiento ilegal de la política.
“El Fiscal Nacional, Ángel Valencia, confirmó la designación del fiscal regional de Arica y Parinacota, Mario Carrera Guerrero, para que dirija la investigación penal en relación a los hechos descritos en publicaciones de prensa y que involucran, entre otros, al exfiscal de la Fiscalía Metropolitana Oriente, Manuel Guerra Fuenzalida”, indica el comunicado.
El vínculo del exfiscal Guerra con Luis Hermosilla
Hace ya una década, la Fiscalía comenzaba una investigación por uno de los mayores escándalos de corrupción que recuerde la política chilena, el caso Penta.
La UDI era el partido en la mira y por eso, Hermosilla tomó el teléfono y llamó a Sabas Chahuán, el fiscal que en ese momento tenía la causa, tras la salida de Carlos Gajardo. Estaba preocupado por la situación de su amigo Andrés Chadwick y también de Sebastián Piñera.
Después de Chahuán, el caso quedó en manos del entonces fiscal Manuel Guerra y fue en esa época en que Hermosilla mantuvo una estrecha comunicación con el persecutor a través de chats, según se vino a destapar ahora, a raíz del caso Audio.
En uno de los diálogos, fechado en 2016, Hermosilla y Guerra hablan de que deben contactar a “Andrés” (por Chadwick) para darle una salida al Caso Penta.
Y ojo, que el paso de Guerra por la investigación de Penta tuvo sus polémicas. En 2018, decidió eliminar los delitos de soborno para los controladores de Penta, Carlos Délano y Carlos Lavín, y recalificar el de cohecho contra el exsubsecretario de Minería, Pablo Wagner.
Esa decisión de Guerra de recalificar los delitos fue objetada por la Unidad de Anticorrupción de la Fiscalía Nacional, lo cual no fue considerado por el entonces fiscal regional oriente.
