Un nuevo antecedente se da a conocer en torno a la polémica fiesta que protagonizaron algunos jugadores de Colo Colo en un bar de Vitacura.

Se trata del evento que reunió a decenas de personas, principalmente jóvenes, y que terminó con la denuncia de una mujer que habría sido víctima de una agresión sexual.

Desde el lunes, personal de Carabineros dio inicio a una investigación para corroborar la grave acusación: además de un inspección en el local, se procedió a recoger declaraciones y las imágenes registradas por cámaras de seguridad.

Sitio alterado

Sin embargo, los investigadores se toparon con un obstáculo: el sitio del suceso estaba alterado.

Según reveló 24 Horas, los equipos especialistas que arribaron hasta el pub Mía no pudieron concretar la diligencia bajo estándares mínimos de calidad.

De acuerdo al citado medio, los encargados del local ya habían ordenado hacer el aseo en las dependencias, lo que significó que los peritos no pudieran levantar la prueba biológica necesaria para acreditar o descartar el delito sexual denunciado. El sitio del suceso ya estaba contaminado con la intervención de terceros.

Pero ojo, que de igual manera se podría comprobar la acusación, ya que sí pudieron llevar a pruebas biológicas los restos de la ropa de la presunta víctima.