Carabineros llegó a la casa incluso con orden de descerrajar. Vivanco no había entregado todos sus equipos y su pareja reveló que tenían programado un viaje a un destino “lejano”.
Hasta con permiso de descerrajar, si es necesario, llegó Carabineros a la casa de la suspendida ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, para incautar equipos que no había reportado en diligencias anteriores.
Los funcionarios del OS-7 de Carabineros cumplieron así una orden emanada por el juez Daniel Urrutia, del Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, a petición de la Fiscal Regional de Los Lagos, Carmen Gloria Wittwer. Todo, en el marco de la investigación penal en contra de la jueza, luego que se conocieran sus chats con el abogado Luis Hermosilla.
El pasado 11 de septiembre, Vivanco ya había hecho entrega voluntaria de un celular y un computador, pero la Fiscalía detectó una posible maniobra para ocultar información y optó por revisar su casa, reportó La Tercera.
La diligencia intrusiva se concretó a eso de las 21:00 de ayer lunes en el domicilio de Vivanco en la comuna de Las Condes. Los funcionarios policiales incautaron un segundo celular de la magistrada, esta vez sería el teléfono institucional; una tablet, que también usaba para sus labores en tribunales; y el computador de su hija, abogada recién egresada de la Universidad Católica.
Sospecharon una “maniobra” de Vivanco
En la anterior diligencia, Vivanco había entregado de manera voluntaria un iPhone 15 y un computador All In One, marca Sony. Sin embargo, causó extrañeza lo antiguo de este último equipo, que se dejó de fabricar hace una década. Además, los investigadores detectaron que la magistrada registraba otro número telefónico a su nombre.
“La entrega voluntaria antes señalada, seleccionando a su conveniencia dispositivos e información para entregar a la investigación, en concepto de la fiscalía, aparece como una maniobra para evitar una diligencia intrusiva y sus consecuentes resultados”, afirmó el fiscal Marco Muñoz Becker, en la petición de allanamiento al tribunal.
Esos antecedentes les hacían “presumir ocultamiento de información”.
Otro dato que generó suspicacias al interior de la Fiscalía fue la mención a un viaje que hizo la pareja de la ministra Vivanco, Víctor Migueles Oteíza.
En su declaración por otra causa, la que lo vincula al fiscal Carlos Palma, Migueles dijo que para este martes 17 de septiembre tenían programado un viaje a un “destino lejano” junto a Vivanco. No dijo dónde pensaban salir.