La capacidad de carga, el rendimiento y la disponibilidad de repuestos son algunos de los aspectos que debe tomar en cuenta antes de comprarlo.
La capacidad de carga del vehículo, su rendimiento y seguridad, además de la tecnología con la que cuenta son los aspectos en los que debería fijarse un comerciante que busca renovar su transporte, de acuerdo a lo que plantea Jorge Pérez, docente de la carrera de Técnico en Gestión Logística, de Duoc UC, sede Maipú.
Según el académico, antes de tomar la decisión de renovar su vehículo de trabajo el almacenero debería considerar aspectos como los mayores gastos de mantención que genera un vehículo usado, además de la menor disponibilidad por los diversos problemas que puede ir generando. Por el contrario, un transporte nuevo puede conllevar "la capacidad de ampliar el negocio, cubriendo un mayor mercado, sobre todo si utiliza el delivery".
Tomada la decisión de adquirir un nuevo vehículo, el docente de la Escuela de Administración y Negocios de Duoc UC aconseja fijarse en varios aspectos relevantes a la hora de trabajarlo.
Mucho ojo con...
"Lo primero a considerar es su capacidad carga; es decir, cuánto peso y qué volumen puede transportar. Luego hay que fijarse en la disponibilidad de repuestos originales y alternativos en el mercado, tanto desde el punto de vista del precio como del acceso a ellos", apunta.
Y añade que "también hay que evaluar el rendimiento del vehículo, cuántos kilómetros da por litro, así como el nivel de tecnología que tiene incorporado".
"Además, es muy importante conocer en profundidad los que se relaciona con la garantía del fabricante, junto con el valor de mantenimiento en los servicios técnicos autorizados, si desea mantener dicha garantía", complementa.
Por último, menciona que "resulta muy útil tener un estimado del precio de reventa del vehículo".
Refrigerados y congelados
Respecto de los vehículos empleados para trasladar productos refrigerados y/o congelados, Jorge Pérez puntualiza que éstos "debieran tener carrocerías térmicas en buen estado y equipos de fríos acorde a los productos a transportar, con mantención permanente".
También menciona que lo ideal es que "el transporte cuente con pisos de aluminios para evitar la corrosión, así como con cortinas de lamas en sus puertas para evitar la pérdida de frío en su apertura".
Y, por supuesto, no se debe olvidar que si se empleará para transportar alimentos, se debe contar con la autorización sanitaria respectiva.
Motos y toritos
El docente de Duoc UC aprovechó de mencionar algunas alternativas a los vehículos de cuatro ruedas, y las centró en dos muy utilizadas.
"Si se emplean para el delivery, las motos proporcionan rapidez en la entrega, lo que incluso se puede convertir en su ventaja competitiva. Además, tienen un mejor rendimiento pues emplean menos combustible, su mantención es mucho más económica que la de un automóvil y, finalmente, requieren una menor inversión para echar a andar el delivery.
La otra opción mencionada por Jorge Pérez son los toritos eléctricos, de los que destaca que "su mejor ventaja es la capacidad de carga que poseen. Y si bien tienen una menor velocidad de desplazamiento que una moto convencional, también los costos de mantenimiento son más bajos".
Además resalta que se trata de "vehículos que tienen una gran autonomía y rendimiento. Y al ser eléctricos, son ecológicos pues no emiten gases contaminantes".