Chile está entre los tres países de América Latina que más gastan al año en comida y otros artículos para las mascotas.
La llegada del Covid-19 cambió muchas cosas, entre ellas la rutina del paseo con las mascotas pero, principalmente, dónde compra el alimento del regalón su dueño. Antes de la pandemia los supermercados y las tiendas especializadas eran los lugares preferidos para hacerlo, pero la distancia social abrió una gran oportunidad para los almacenes de barrio, muchos de los cuales ya habían notado el enorme crecimiento de este mercado y comenzaron antes a comercializar estos productos.
Tal cual, porque según cifras entregadas en su momento por la empresa de investigación de mercado Euromonitor International, cada chileno gasta en promedio más de 5.500 pesos al año en alimentos y otros artículos para sus mascotas, lo que ubica al país entre los cinco que más invierten en el tema en América Latina.
Esta realidad "revela que la preferencia por tener mascotas es significativa y que prima un alto lazo emocional. Quienes tienen mascotas evalúan la calidad de los alimentos y los accesorios y, por ende, no sólo buscan satisfacer la necesidad básica de las mascotas, sino que además sean productos con atributos de calidad y saludables", plantea Patricia Esparza, académica de la Facultad de Ingeniería y Negocios de Universidad de Las Américas.
Y destaca que "el 45% de la demanda de alimentos para mascotas del año 2019 estaba representada por el segmento denominado millennial, lo que marca una tendencia favorable y de crecimiento para el mercado de los alimentos y para los productos denominados especializados en los próximos años".
- Entonces está claro que es un buen negocio para el almacenero sumar estos productos entre la oferta para su clientela...
- Dado que las mascotas son parte de la familia, la compra que realiza el dueño para satisfacer el consumo de su mascota está en el presupuesto familiar como un ítem más; es decir, existe una demanda de estos productos a la que se debe responder, y por ello se recomienda incorporarlos a la oferta de productos del almacén.
- ¿En qué lugar debería ubicar el comerciante estos productos para llamar la atención de los compradores?
- Estos productos deberían estar en un lugar separado del resto de la oferta, ojalá en un espacio especial con señales de ubicación vistosas, separados por tipo, porque así quienes van por nutrición pueden verse tentados a comprar algo más.
- ¿Cómo debería el almacenero dar a conocer más activamente entre sus clientes que vende estos productos?
- La mejor manera es mediante afiches que describan los artículos y la ubicación dentro del almacén. Una buena idea es generar packs combinados de nutrición y otro tipo de artículo, tanto como promociones especiales.
"Estos productos, más que otros, requieren que se use la comunicación visual, y los carteles y señales son una buena herramienta de información hacia los clientes", añade.
- ¿Qué otros artículos asociados debería sumar el comerciante a su oferta para las mascotas?
- Los artículos asociados a la salud de las mascotas son especializados y se sugiere realizar convenios con clínicas o profesionales de la salud para venderlos si es que el rubro del negocio lo permite. Se puede agregar cualquier otro artículo que sea demandado por los dueños de mascotas, como, snacks, juguetes, artículos de aseo, ropa de abrigo, correas de paseo, bolsas recolectoras de desechos de las mascotas y complementos. En resumen, a la oferta de alimentos húmedos y secos para mascotas se pueden adicionar snacks y golosinas y productos especializados.
- ¿En qué debe fijarse el comerciante al momento de tomar la decisión de qué marca o marcas de alimentos para mascotas comercializará en su local?
- Lo que debe considerar son las preferencias de los clientes, en este caso los dueños que traspasan los gustos de su mascota a la acción de compra. Esto se puede recoger revisando datos de consumo de marcas y preguntando directamente a los clientes. Otra fuente es consultar a un especialista en veterinaria.
"Es importante que ofrezca productos que consideren las características de las mascotas, los gustos de estas, las marcas preferidas por los dueños, los tamaños, las características específicas de los productos de nutrición entre otras. También debe considerar el abastecimiento continuo desde el proveedor para evitar el riesgo de falta de stock. Por último, dado que la variable precio es muy sensible en estos productos, éstos deben ser accesibles a la mayor parte de la clientela", concluye Patricia Esparza.
No todas las mascotas comen lo mismo
Algo que hay que tomar en cuenta al momento de decidirse incorporar los alimentos para mascotas en el almacén es que perros y gatos tienen distintas necesidades y por eso sus alimentos son diferentes y no deberían intercambiarse.
"Si bien ambas especies puede clasificarse como carnívoros, los gatos son carnívoros estrictos, por lo que su requerimiento de proteínas, en cuanto a calidad y cantidad, es mayor a la de los perros", explica la académica de la Escuela de Medicina Veterinaria de la UDLA, Paola Mujica.
Al respecto, detalla que "en el gato existe un mayor número de aminoácidos esenciales que deben ser aportados por la dieta que en el perro. Y en cuanto a vitaminas, también existen diferencias importantes en los requerimientos entre ambas especies, siendo los niveles de vitaminas A y B1 (tiamina) más críticos para los gatos que para los perros".
Respecto de la forma en que se deberían guardar el stock de estos alimentos en el almacén, la docente explica que "deben almacenarse a temperatura ambiente, en un lugar seco y alejado del sol". Pero antes de hacerlo, recomienda fijarse en que el alimento esté bien sellado y en la fecha de vencimiento del producto.