El adhesivo para cerámico está constituido por una mezcla de cemento, arena y aditivos químicos especiales, diseñados para pegar cerámicas, mosaicos u otros elementos pétreos.
La formulación de este producto varía dependiendo del tipo de proyecto, ambiente y materiales donde se aplicará el recubrimiento cerámico, como por ejemplo:
- Comunes: en superficies rígidas (pisos o muros) en interiores y exteriores con presencia de humedad o sin ella.
- Pétreos: piedra, piedra pizarra, porcelanatos y piezas de baja absorción.
- Superficies flexibles: con sustratos con mayor absorción de humedad y flexibles tales como el fibrocemento, yeso-cartón, entre otros.
Consejos de aplicación
Por lo general, se debe hacer la mezcla y dejarla reposar algunos minutos, sin embargo, es conveniente leer las instrucciones del fabricante que están impresas en el envase.
- El adhesivo se debe aplicar con una llana dentada en un ángulo de 45°, "peinando" el pegamento, formando un arco o semicírculos en diferentes direcciones.
- Las palmetas se colocan sobre el adhesivo y deben ser golpeadas suavemente con un martillo de goma. El objetivo es asegurar la adherencia total de la superficie de contacto con la palmeta.
- Una vez instalado el pegamento y puestas las palmetas, es el turno de fraguar. En este proceso se utiliza un fraguador (con pestaña de goma), que permite extender las mezcla sin rayar las palmetas. El fragüe está disponible en distintos colores y es vital para el acabado del trabajo final.