Son la base de toda edificación, elementos fundamentales que aseguran una construcción firme y duradera con el paso del tiempo.
Sin embargo, todo lo anterior no se sustenta sin un buen estudio de suelo, que es, en definitiva, el lugar que soportará la estructura.
Un aspecto fundamental de la construcción es la correcta colocación de las estructuras que soportarán las cargas de todos los componentes superiores. Ellos son las fundaciones y radieres.
Cabe recordar que las fundaciones transmiten las cargas al suelo, las que no deben superar la capacidad del mismo. La interacción que existirá entre el suelo soportante y la estructura superior es vital para la correcta elección del tipo de fundación que se desee construir.
La importancia del suelo
Sin embargo, otro factor importante a considerar, independiente del tamaño de la obra es el suelo. Es por eso que "la principal consideración que se debe tener a la hora de diseñar y construir la estructura de fundaciones para una edificación de uno o más pisos, es que se haya efectuado el correspondiente estudio de mecánica de suelo en el sitio donde se va a construir", sostiene Camilo Guzmán, docente de Ingeniería y Técnico en Construcción de Duoc UC sede Alameda. De esta manera se logra corroborar que el piso es capaz de soportar la estructura de manera estable sin que se produzcan asentamientos excesivos que puedan afectar la integridad de la edificación.
Tipos de fundaciones
Existen fundaciones superficiales y profundas. Ambas represente grandes diferencias en cuanto a su geometría, comportamiento de suelo, funcionalidad estructural y sistema constructivos.
Superficiales
- Zapatas aisladas
- Zapatas corridas
- Zapatas combinadas
- Losas de fundación
Profundas
- Pilotes y pilas.
Corridas y aisladas: las más usadas en Chile
Las fundaciones más utilizadas en la industria de la construcción son las denominadas corridas, "las cuales están constituidas por una sección continua que garantiza la distribución uniforme de las cargas transmitidas desde la edificación hacia el terreno", explica el académico de Duoc.
En segundo lugar se encuentran las fundaciones de tipo aisladas, las cuales tienen por objetivo "generar un apoyo discreto en elementos que componen una estructura, donde su principal función es transmitir los esfuerzos de pilares y vigas de fundación al terreno en un sector puntual", sostiene.
Consejos para lograr un buen radier
El profesor Camilo Guzmán, entrega algunos datos al momento de construir un radier:
1. Antes de colocar el hormigón, se debe verificar que el terreno donde estará apoyado el radier se encuentre compactado y limpio. Una buena técnica es colocar una capa de gravilla, la cual se moja para posteriormente ser compactada con pisón o compactador mecánico, sobre esta capa de gravilla es importante colocar un sello hídrico (manga de polietileno).
2. Controlar la dosificación de los materiales utilizados en la confección de la mezcla, además de verificar que no exista materia orgánica en los materiales componentes principalmente en áridos y agua.
3. Revisar que se cumpla con el espesor mínimo especificado para la capa de hormigón que constituye el radier. Se debe tener en cuenta la colocación de una malla acma de refuerzo, la cual está encargada de soportar los esfuerzos de flexión producidos por tránsito y peso propio del radier.
4. Considerar un método de compactación para el hormigón, el cual se puede efectuar a través del empleo de un equipo mecánico o herramienta manual, con el fin de eliminar el aire atrapado en la mezcla.
5. Contar con herramientas que permitan realizar un acabado superficial uniforme sobre el radier, generalmente se pueden utilizar: platachos de madera, regletas o perfiles de aluminio liso.
6. No permitir que el hormigón pierda humedad durante el proceso de endurecimiento, para ello se debe tapar con polietileno (evitando la evaporación brusca del agua) y rociar con agua reiteradas veces al día con el fin de reducir el micro-agrietamiento por efecto de la retracción.