El cambio del formato de los mundiales a partir del 2016 fue, al parecer, el puntapié inicial de una serie de reformas que hará la FIFA.
Marco Van Basten, ex megaestrella del fútbol mundial, ahora trabaja para el organismo de la pelotita como director general para el desarrollo técnico de la FIFA, y fue el encargado de dar a conocer algunas nuevas reglas que se están analizando para poner en práctica arround the world.
Chau fuera de juego
Una de las primeras ideas que sapeó Van Basten fue la eliminación del fuera de juego. Así existirían más opciones de gol y muchos más goles, lo que beneficiaría al espectáculo.
"Esta es mi opinión personal: tengo mucha curiosidad acerca de cómo funcionaría el fútbol sin fuera de juego", la tiró con el Bild alemán.
Chau tarjetas amarillas
En lugar de llenar de tarjetas a los peloteros, la FIFA está pensando en penalizar con tiempo fuera a los que se pasen con alguna chuleta. Tres, cinco o diez minutos dependiendo de la gravedad.
Desafío en vez de tiempo extra
Alguna vez el fútbol gringo lo implementó: el futbolista se la juega en un mano a mano con el arquero. Van Basten lo explica mejor: "Cada equipo tiene cinco intentos. El árbitro marca, entonces el jugador comienza a 25 metros del portero. Dentro de los ocho segundos, la acción debe ser completada. El portero no podrá salir del área. Esto es espectacular para los espectadores e interesante para el jugador. Se tienen muchas más opciones: puede driblar, disparar, ver cómo reacciona el portero, que es mucho más similar a una situación típica de juego".
Tiempo efectivo al final del partido
Típico que un equipo está sacando un buen resultado de visita, dando la sorpresa, y en los minutos finales los futbolistas se hacen los lesionados, se pierden las pelotas del estadio o al arquero se le desatan los zapatos. Por lo mismo, se está pensando que los últimos diez minutos de partido se tenga que parar el reloj, tipo NBA. Si la pelota sale, el tiempo se detiene; si un jugador se lesiona lo mismo.
"El público quiere ver acción, metas y duelos. Cuanto más tiempo un reemplazo, tome la ejecución de un tiro libre o un jugador se lesiona, es tiempo de juego perdido. Tenemos que ser agudos. Por lo tanto, se discute también sobre la fabricación de los últimos diez minutos del partido a un período de tiempo efectivo de juego. (...) La bola debe rodar cada segundo de los últimos diez minutos. Porque si un equipo está cerca del final, van a hacer nada para ganar tiempo, tales como sustituciones", soltó Van Basten.
Cambios repetidos
Se discute sobre la posibilidad de que los jugadores que salen reemplazados puedan ingresar. Este aspecto sería solo en partidos juveniles ya que los árbitros se volverían locos desconociendo cuándo entró o salió algún futbolista.
Más sustituciones
Se sabe que por reglamento solo se pueden hacer tres cambios, lo que la FIFA está planeando cambiar. Sin embargo, también está el problema de cómo lo haría el árbitro si se llegan a hacer 7 u 8 cambios por equipo en un mismo partido.
Solo el capitán va al choque
Una de las reformas que se piensan es copiar lo que se hace en el rugby: solo el capitán del equipo puede darle cara al árbitro. Así se evitan las aglomeraciones alrededor de los saqueros, quienes sufren cada vez que tiene un cobro dudoso.
Número máximo de faltas
En la NBA, si un defensor comete cinco faltas debe abandonar la cancha. Bueno, Van Basten cree que debería ser algo similar en el fútbol. El que se vaya al chancho con las chuletas debe abandonar la cancha. Corta y simple.
8 contra 8 en canchas más chicas
"En los jóvenes o mayores de 45 años sería perfecto 8 contra 8 jugadores en un espacio más pequeño. A menudo pasarían, promovería la participación en el juego y tendría más diversión porque tienen menos carreras", la tiró sobre este aspecto el director para el desarrollo técnico de la FIFA.
Menos mochas
Se sabe que, por ejemplo, en Inglaterra juegan casi todos los miércoles y domingos. Así, se llega a una suma importante de partidos durante una temporada, lo que según la FIFA le jugaría en contra a la calidad del espectáculo. Por lo mismo, se quiere plantear la idea de que por temporada deberían jugarse 50 partidos y no los 80 aproximados que se disputan ahora.
"Tenemos que centrarnos en la calidad del juego. Tenemos las principales estrellas como Ronaldo, Messi e Ibrahimovic, y los fans los quieren ver mentalmente frescos y en buena forma física, ya que tendrían que someterse a un menor número de juegos", la cerró.