"Linares morirá con esto", fueron las categóricas palabras del alcalde de dicha ciudad, Mario Meza, luego de que la empresa Iansa, ubicada en el camino a Yerbas Buenas, anunciara su cierre.
Un escenario nada dulce que dejará sin trabajo a más de 1.500 personas y afectaría a cerca de 4 mil. Las consecuencias de esta crisis tendrían serias repercusiones en la economía de la Región del Maule.
Según declaraciones entregadas desde la empresa, el declive de la industria del azúcar ha ido empeorando debido a los cambios alimenticios de las personas a nivel mundial. La vida "light" y el aumento en el consumo de endulzantes es uno de los principales detonantes.
Preocupante
Con más de 60 años de trayectoria, el cierre de la empresa agroindustrial en la región es vista con preocupación por los linarenses.
En los últimos días, remolacheros habían realizado protestas para evitar el cierre de la planta, pues la presencia de esta había sido clave para la economía de la zona.
Ciro Tapia, presidente del sindicato de trabajadores de Iansa en Linares, señaló que "su cierre va a crear mucha cesantía. El trabajo de esta planta es fundamental para la provincia, se generan más de 31 millones de dólares que quedan acá".
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