Después de 32 años de su fallecimiento, esta mañana exhuman los restos de Rodrigo Anfruns Papi, quien tenía sólo seis años cuando fue encontrado muerto en junio de 1979, tras estar desaparecido durante 11 días.
En el Cementerio General, donde descansa el pequeño, se reunieron esta mañana dos peritos del SML, personal de la PDI y dos tanatólogos de la Universidad de Chile.
La diligencia, encabezada por el ministro Manuel Valderrama buscan hallar material genético en las uñas del menor y establecer la data de muerte.
Esto fue solicitado por el CDE, luego de que un informe de la Universidad de Chile estableció que la data de muerte de Anfruns era de tres días y, además, en su cuerpo tenía rastros de posibles torturas.
El ministro Valderrama investiga también la posible participación de la CNI en el crimen del niño, a pesar de que existe un autor confeso, quien fue sobreseído a los 16 años.
