La versión chilena de los Transformers se llama Citrobot y tiene un radiador en vez de pelvis y unas manos capaces de penetrar cualquier superficie. Sin embargo, no avanza más de dos metros.
"Lo queremos a toda costa y por eso estamos en planes de hacer que Citrobot camine, porque ahora no se puede mover de forma independiente", dice Eduardo Castro, profesor guía de un grupo de alumnos del área de mecánica de Inacap, que de puro ociosos le dieron vida a este bólido de características humanas.
Citrobot fue hecho con las partes de una citroneta y, según Eduardo Castro, se construyó a la velocidad de la luz, pues sólo tardó una semana en estar listo.
"Al principio tuvimos que ir a comprar las partes de la citroneta, después hicimos las secuencias y luego nos dispusimos a armarlo. Todo se hizo muy rápido", cuenta el profesor que queda chocho cada vez que el robot mueve sus brazos y se gira de izquierda a derecha.
Como en Chile no existen antagonistas para Citrobot, como los Decepticons en los Transformers, la única batalla que tiene es mantenerse limpio. Esto es más peludo que encerar el piso con un cepillo de dientes, según cuentan los alumnos que lo cuidan a diario.
"Lo aceitamos mucho, reparamos todos sus neumáticos y también los esquemas eléctricos. Lo más difícil es la línea de compresor", dice uno de los cabros del team que se peina con la mantención del transformer chilensis que ya lleva cuatro años en su regazo.
"Todo esto partió como un ocio entre nosotros, pero ahora es súper importante tener muy bien cuidado a Citrobot. No podemos dejar de cuidarlo nunca", agrega Eduardo Castro.
Esta joyita, junto a otras se exhibe en la Expocarreras, que sólo dura hasta mañana domingo.
En el evento que se realiza en el Parque Cerrillos no sólo se muestra el transformer capaz de asombrar a cualquiera, sino que también hay demostraciones de motocross, tocos clásicos de todos los años y autos tan iluminados que las luces delanteras no tienen nada que envidiarle a las de una discoteque.
VALE SUEÑA CON VER A JESUCRISTO
Valentina Vergara estudia inglés en Arica, y se pegó el pique a Expocarreras sólo para ver los autos que ahí se mostraban. Su favorito, por lejos, fue el DeLorean, bólido utilizado en la saga de "Volver al futuro".
"Si tuviera que escoger una fecha, escogería el 25 de diciembre del año 0. Me gustaría ir a la época de Jesús y ver su mito, corroborar si todo es verdad", cuenta la patiperra que posa feliz al lado del toco de Emmet Brown.
La morenaza salió bien curiosa y agregó que para aprovechar el pique, con el moderno auto iría al futuro para pegarle una sapeada cortita a sus sucesores.
"Iría al futuro a la máxima fecha que se pudiese ir. Es una inquietud para mí ver cómo crece el mundo para esa fecha, en qué situación estarían mis nietos y mi familia", dijo la mujer.
Eso sí, la Vale quedó apenada cuando cachó que no iba a poder disfrutar el DeLorean como corresponde, pues no dejan tocarlo ni con el pétalo de una rosa.
