En buen chileno, a Cristiano Ronaldo le faltó puro bajarse los boxers, los mismos que la Paris Hilton encontró que escondían re poco, para humillar aún más a López Vallejo, el portero del Zaragoza que ayer pareció que jugó ante Nadal en el Bernabéu, porque se comió un 6-0 que, difícilmente, olvidará.
Corría el minuto 50 y el portugués que jura que hace 3 mil abdominales diarios recibió un pase perfecto de Marcelo, que bajó como un imán. Se sacó a uno, enganchó a otro y ¡paf! La clavó arriba con un zurdazo que no iba a ser el de la humillación definitiva, porque Benzema más tarde cerraría el festival con la media docena, pero sí hizo que la Casa Blanca al fin vitoreara al Pelle y sus mostros.
Justo en el día que el Barcelona conquistó el Mundial de Clubes, al menos los adictos al merengue se desquitaron viendo la mejor presentación del Real en lo que va del torneo.