Abogada defensora de los turistas chilenos detenidos en Malasia sostuvo que los jóvenes condenados a dos años por homicidio culposo pueden optar a una rebaja de la pena.
"Mis clientes están felices, muy felices. Podrían volver a casa antes de Navidad porque pueden tener una remisión de pena de ocho meses", concluyó la abogada Venkateswari Alagendra, luego de que la justicia de Malasia condenara el jueves a los dos turistas chilenos a dos años de cárcel, luego que los jóvenes se declararan culpables por "homicidio culposo", debido a la muerte de un ladyboy.
La legista que lideró la defensa de Fernando Candia (32) y Felipe Osiadacz (28), encarcelados tras la pelea en el hotel poco después de su llegada a Malasia, agregó que es de "interés público devolverlos" a su país porque "son víctimas de las circunstancias. Fueron atacados".
El juez Mohamad Nazlan Mohamad Ghazali los condenó a dos años de cárcel, efectivos desde que ingresaron en el recinto penitenciario de Sungai Buloh en agosto de 2017. Claro que debido a los 15 meses que cumplieron en prisión preventiva, además de una probable reducción de la condena, de un tercio de la pena por buena conducta y otras materias como su condición de extranjeros, significaría la liberación de los dos turistas chilenos en poco más de un mes. O sea, para las fiestas de fin de año. La resolución se espera en un par de semanas más.
Horca. Los dos estudiantes chilenos se encontraban de vacaciones en el país asiático cuando fueron detenidos en octubre de 2017, acusados de asfixiar a Yusaini Bin Ishak (26) y desde ese momento permanecieron presos en la cárcel de Sungai Buloh. El complejo penitenciario de máxima seguridad y uno de los más grandes del país, se ubica a 30 kilómetros del centro de la ciudad del mismo nombre y cercana a la capital, Kuala Lumpur.
En un primer momento Fernando y Felipe arriesgaron ser condenados a morir en la horca.
El juicio comenzó recién el 29 de mayo de este año, tiempo en que Fernando y Felipe debieron pasar tras las rejas.
Sentencia. Tras leerse la sentencia ayer, los turistas lloraron de alegría y abrazaron a sus familias y amigos.
Minutos antes de que se diera a conocer la sentencia, Felipe Osiadacz pidió perdón a la familia de la víctima: "Quiero pedirle perdón a su familia. Tenía planes de ir a vivir a España con mi hermosa novia. No somos criminales".
Por su lado, Fernando Candia explicó que el incidente que causó la muerte se produjo de forma "súbita". "Quiero casarme y tener una vida normal", aseguró.
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