El pasado fin de semana Puerto Montt recibió a Deportes La Serena (1-1) por una nueva fecha del torneo potreril. Como se ha hecho una costumbre, el Loco Abreu entró a la cancha como uno de los grandes protagonistas de la jornada.
Anotando su quinto gol durante este campeonato (está a uno del pichichi de la "B"), el uruguayo fue a festejarlo atrás de un arco donde un grupo de hinchas estaba ubicado. Lejos de la alegría, el charrúa estaba enojado.
"La afición, la que está detrás del arco, un grupo de ellos, me gritó viejo de mierda. Entonces, me parece que a uno de los goleadores del campeonato, que te evoquen de esa manera y en lo personal, estoy haciendo una catarsis. Nunca lo sentí ni con los de River. Ni con San Lorenzo ni Rosario Central, y ustedes saben lo que son", tiró el delantero en conversación con La Tercera.
Responde
El descontento del pepero tenía sustento. Lejos de las críticas que decían que vendría a retirarse, Abreu ha respondido a las expectativas siendo uno de los goleadores de los potreros. Aunque no ha servido mucho para que el equipo esté peleando en la parte alta de la tabla.
"He aprendido a no tener la hipocresía de ser amigo del campeón. Y sí a apoyar a la gente que necesita ganar. ¿Qué quiero decir con eso? Que a mí me enseñaron como aficionado a apoyar al equipo y alentarlo en los 90 minutos. Porque quiero lo mejor y quiero ganar. Cuando termina el partido, todos los reclamos, críticas, cánticos y quejas uno los tiene que entender. Mientras la pelota rueda es traicionero el fútbol. Crees que estás ganando una pulseada con críticas y en un minuto se te da vuelta y te abrazas y festejas", filosofó pa' concluir.