NUEVA YORK.- Algunos periodistas jaguares casi se fueron a las manos con la policía gringa que custodiaba las medidas de seguridad en el Hotel Millenium, donde se hospeda el Presi Sebastián Piñera para participar en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
La trifulca se armó después del desayuno que tuvo Don Tatán con el ex CEO de Microsoft, Bill Gates. Después de la choca, los ágiles chilenos se acercaron al mandatario. Por la gran cantidad de periodistas, cámaras y cables se armó un desórden común en ese tipo de actividades.
La majamama de micrófonos y cabezas causó una reacción exagerada de los policías gorilones, quienes empujaron con fuerza a los periodistas. Los guardias incluso sacaron sus esposas y amenazaron con llevarlos detenidos.
Como era de esperarse, la violencia de los policías causó la molestia de los apóstoles de la prensa, quienes estaban cubriendo una actividad oficial del Presidente.