Pura chiva resultó la denuncia por robo y secuestro que antenoche formuló el hijo de un empresario de La Dehesa, en Lo Barnechea.
Mauricio Fuentes (19) inventó el falso plagio para ocultar una estafa telefónica que le hicieron patos malos de la cárcel Colina 1.
En la primera versión que dio a la policía, aseguró que tres hombres habían amenazado por teléfono con meterse a su casa si no sacaba a la calle las cosas que habían en la caja fuerte.
Después inventó que en la calle lo encañonaron y que lo llevaron en auto hasta la comuna de La Cisterna, donde lo habrían dejado abandonado durante la madrugada.
El breva engrupió que mientras regresaba en taxi a su casa, un fiscal lo había llamado para decirle que no hiciera ninguna denuncia, porque sus secuestradores ya habían sido detenidos.
El muchacho ayer en la tarde fue interrogado por detectives antisecuestros y, tras caer en varias contradicciones, contó la pulenta.
Reconoció que los estafadores lo hicieron huevopato con que se había ganado un auto y una casa en un concurso de Televisión Nacional de Chile.
Dijo que como condición para cobrar los premios debía llevar a la Plaza Italia las cosas más caras de su casa. Y el pastel hizo caso.
En una caja metió 800 lucas en efectivo, joyas, relojes, dólares, euros, pasaportes y hasta un cheque en blanco, todo avaluado en 25 millones.
Cuando llegó con la caja a Plaza Italia los vivarachos le dijeron que debía mandarla en un radiotaxi contratado por ellos al paradero 25 de la Gran Avenida, mientras él cobraba el premio en TVN. Fue así como el maravilla mandó las cosas a La Cisterna y después fue a buscar sus premios a Canal 7, donde le dijeron que lo habían pasado por agua tibia. ¿Será?
