El primer secretario de Estado en la historia de la flamante cartera de Ciencia y tecnología se iba todos los días pedaleando a su trabajo desde Vitacura a Independencia.
A pesar de que vive en Vitacura, el nuevo ministro de Ciencia y Tecnología pedaleaba en una taquillera bicicleta rosada marca Hard Rock todos los días hacia su trabajo ubicado en Independencia. En el lugar el biólogo formado en la Universidad Católica hacía clases como profesor titular en el departamento de neurociencia de la facultad de Medicina de la U. de Chile
Andrés Couve (49) no está ligado a la política, pero desde el 2016, cuando dirigía la Sociedad de Biología Celular, se metió de cabeza a trabajar para que el Estado se ponga con lucas y fomente la investigación.
Además, durante el gobierno anterior integró la comisión presidencial "Ciencia para el desarrollo de Chile", que fue piedra angular del ministerio que llegaría a dirigir.
El secre de Estado es chascón, mide un metro 90, tiene 49 años y posee un currículo impecable. Se formó durante 11 años fuera de Chile, porque en Nueva York hizo un doctorado en biología celular, y luego en Londres un postdoctorado en neurobiología.
El 2004 volvió al país y se fue a Valdivia a trabajar en el Centro de Estudios Científicos, pero sólo duró un año porque no se llevó bien con su director, Claudio Bunster, y luego en Santiago comenzó a trabajar en la Chile.
Su interés por la biología nació en su niñez cuando en viajes con su familia descubrió su amor por la naturaleza y los paisajes, sobre todo los de Magallanes.
Couve en su carrera ha publicado alrededor de 40 estudios relacionados con biología celular y las neuronas, pero aún así considera que Chile está a años luz de obtener un Premio Nobel en ciencias por culpa de la miserable inversión estatal.
"No somos generadores de conocimiento, por eso no somos una nación poderosa. Importamos conocimiento, y diría que estamos cerca del conocimiento que generaron los naturalistas del siglo XIX", declaró el año pasado.
Ayer también habló luego de ser investido por el Presidente Sebastián Piñera en La Moneda, en donde a Couve se lo vio como pocas veces luciendo de impecable terno y corbata.
"Es una oportunidad para que el país adquiera una manera de hacer las cosas que no ha sido incorporada previamente. Pero desde una posición de mucha mayor humildad de parte de los científicos, que debemos entender que la ciencia no es la realidad, sino una forma de conocerla, que también convive con otras formas. Si el ministerio va a ser un púlpito para que los científicos hablen desde un altar, yo me opongo", dijo.