Combos iban y combos venían... Así se han pasado los últimos días el Servicio Electoral y el Registro Civil de nuestro terruño.
Es que el pastelazo no es menor, pues alrededor de 500 mil compatriotas fueron cambiados de domicilio electoral y, el drama, es que nadie les consultó.
Esto significa que un gran sector de la gallada no sólo se quedará sin votar en la comuna que acostumbra y que le interesa, sino que además hay algunos chiquillos que si decidieran cumplir con su deber cívico, el próximo 23 de octubre, necesitarían viajar miles de kilómetros.
Tal es el caso de Guillermo Ponce, de Providencia, quien fue enviado a Villa Las Estrellas, en la Base Presidente Frei de la Antártica, lugar que, como graaan parte de los chilenos, ni siquiera conoce. "Es una situación imposible de entender", señaló el achacado hombre.
Pero no es todo. Una empresa externa que hizo un estudio del Patrón Electoral Provisorio soltó en agosto pasado un informe donde denunció un montón de líos que tenía el registro e informó al Servel.
Además de gritar que había inconsistencia entre los cambios de domicilio informados por el Registro Civil y lo registrado en el Patrón Electoral, soltó que ya había tres mil personas pataleando por el tema.
Revelaron, además, que estaba la patá con algunas fechas de nacimiento porque aparecían electores con cerca de 140 años y hasta 2.088 ciudadanos con una misma dirección, como sucede con un domicilio de la comuna de San Bernardo de la Provincia del Maipo.
Qué dijo el otro
El director del Registro Civil, Luis Acevedo, explicó que se trataba de un error informático que se generó antes de su administración, pero que ya estaban investigando para ponerle un paralé al tema.
Ante las acusaciones de que este cuento estuvo más preparado que mesa de cumpleaños, Acevedo descartó una manipulación de datos y dijo que los afectados por el cambio de domicilio son 17 mil ciudadanos y no más.
"El Servel tuvo el tiempo, las facultades legales para revertir esta situación", alegó.
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