Chilito y Argentina presentaron hoy, mediante una declaración conjunta, su rechazo a las pretetensiones del Reino Unido sobre territorios antárticos y su plataforma continental. El documento fue firmado anoche en la base Presidente Eduardo Frei y hoy las delegaciones de parlamentarios viajaron hasta la base che Teniente Jubany.
El texto, que lleva la firma de siete diputados argentinos y ocho chilenurris, indica que "las Comisiones de Relaciones Exteriores y Culto de la Cámara de Diputados de la República Argentina, presidida por el diputado Ruperto Godoy, y de Relaciones Exteriores, Asuntos Interparlamentarios e Integración Latinoamericana de la Cámara de Diputados de Chile, presidida por el Diputado don Renán Fuentealba (...) reiteran su común posición ante toda pretensión del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda de Norte sobre territorios antárticos y su plataforma continental y expresan que no reconocen sus fundamentos".
El gobierno inglés había anunciado en octubre de 2007 que quería sentar reales sobre un sector del lecho marino de la Antártica, que se superpone a los territorios de Chile y Argentina, pretensión a la que le hicieron media tapa chilenos y argentino.
El rechazo está basado en el Tratado Antártico, firmado en 1959 por 12 países, entre los que se cuentan la Fotocopia Feliz del Edén, Argentina y también el Reino Unido, el que congela las pretensiones territoriales de los firmantes, impide la negación o afirmación de derechos de soberanía y prohibe futuros reclamos territoriales.
HASTA EN CHINA SE ESCUCHÓ...
Junto con el rechazo común de los parlamentarios de ambos países, éstos también reivindicaron la plena vigencia del Tratado Antártico y su protocolo sobre la protección del medio ambiente, y apoyaron además "las acciones que impulsen sus gobiernos para reservar sus derechos sobre la plataforma continental antártica" y se comprometieron "a continuar impulsando el uso pacífico del continente antártico, así como los estudios y la cooperación para el desarrollo de la investigación científica y la defensa de su medioambiente".
El Tratado Antártico de 1959 prohibe la extracción de combustibles y minerales en el continente blanco hasta el 2048 y sólo autoriza actividades con fines pacíficos.
