Es posible que la cuenta pública que ayer dio La Jefa sea recordada por una anécdota que protagonizó el viejo Ford Galaxie 500 XL que adquirió el Gobierno de Eduardo Frei Montalva en 1966, porque los autos que entonces tenía La Moneda pasaban malos.
Resulta que como se acostumbra, nuestra Primera Mandataria iba a realizar el recorrido entre el palacio del Cerro Castillo y el congreso de Valpo en el vehículo negro descapotable que, debido a sus antigüedad, llegó al Puerto arriba de un camión, debido a que la cuestión antediluviana se quedó en pana en Av. España.
Ahí el chofer intentó varias veces traer de nuevo a la vida al auto, los motoristas lo empujaron, el conductor puso segunda y tampoco "andó".
De inmediato empezó a correr un operativo de emergencia que en tiempo récord consiguió un jeep de la infantería de marina, el cual afortunadamente estaba tan limpio que en su superficie La Jefa se pudo mirar al espejo.
Una señoras copuchentas que miraban la escena desde un balcón aprovecharon de filmar el drama del veterano vehículo y compartieron las imágenes en redes sociales, así que no pasó piola el condoro del mecánico de La Moneda.
A la comisión de bienvenida al Congreso, a los periodistas y a la barra pop le llamó la atención que Bachelet se dejara caer en el vehículo militar.
La formalidad y elegancia del Ford dejó paso a la estampa castrense del jeep que funcionó de lo más bien y también fue usado por La Jefa cuando se echó el pollo una vez terminada la ceremonia.
Lanchón
Francisco Vidal nos contó que viajó en el Ford presidencial dos veces. "Lo usé siendo ministro del Interior de Lagos el 18 de septiembre del 2005 y el día que el mismo traspasó el mando a Bachelet el 11 de marzo de 1990.
A mí el Ford no me gustó nunca, es demasiado lanchón, me gustan las cosas más prácticas como los jeep. Muchos años se usaron carruajes que duraron hasta Frei Montalva", contó.