"Espero escuchar todas las voces y trabajar con todos los actores para promover y proteger todos los derechos humanos de todos los venezolanos", dijo.
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, inició una visita a la devastada Venezuela, cuyo gobierno se expresó dispuesto a "corregir" con su ayuda lo que haga falta para proteger a la población.
"Espero escuchar todas las voces y trabajar con todos los actores para promover y proteger todos los derechos humanos de todos los venezolanos", señaló Bachelet en Twitter tras su arribo a Caracas la tarde del miércoles, por invitación del presidente Nicolás Maduro.
La diplomática, que anunció una declaración para el viernes cuando concluye su estancia, se reunió en la noche con el canciller Jorge Arreaza.
"Queremos que la oficina de la alta comisionada de manera constructiva nos recomiende, nos sugiera, nos oriente y poder ir de la mano con ellos a (...) corregir lo que haya que corregir, a rectificar donde haya que rectificar para poder preservar los derechos humanos de los venezolanos", dijo Arreaza tras la cita.
La oposición acusa a Maduro de una violación sistemática de las garantías fundamentales y de haber sumido al país en la peor crisis socioeconómica de su historia moderna.
Bloqueo
En una declaración a través de la televisión gubernamental, el canciller añadió que también conversó con Bachelet sobre el impacto del "ilegal bloqueo financiero y comercial", como se refiere a las sanciones de Estados Unidos para asfixiar a Maduro.
Arreaza dijo haber señalado a la alta comisionada que esas medidas, que incluyen una prohibición a la venta de petróleo venezolano en el mercado estadounidense, dificultan el "avance del modelo de protección de los derechos humanos" del gobierno socialista.
Según Caracas, las sanciones complican la importación de alimentos, medicinas e insumos hospitalarios, y han causado un daño de unos 30.000 millones de dólares a la economía.
Bachelet es crítica de esas medidas, pues según ha dicho teme que repercutan sobre los "derechos básicos y el bienestar de la población", en un país donde el petróleo financia 96% del presupuesto.
Venezuela en crisis
La exmandataria se encontrará con un país cuya economía se redujo a la mitad entre 2013 y 2018, y donde la producción petrolera perdió dos millones de barriles diarios en la última década.
Una situación que ha llevado a que siete millones de personas -un cuarto de la población- necesite ayuda humanitaria urgente, según un informe de la ONU.
Se estima que 22% de los menores de cinco años sufren desnutrición crónica y 300.000 pacientes están en riesgo por falta de tratamientos y medicinas, añade ese estudio.