Grupo de encapuchados tiñó el histórico monumento como un recordatorio a "los caídos" en las manifestaciones. Casi tres mil personas se dieron cita en Plaza Italia, desafiando las normas sanitarias.
Antes del arribo de la pandemia del coronavirus a nuestro país, los viernes eran considerados días de manifestaciones y protestas en Plaza Italia.
Con el avance de la emergencia sanitaria y las cuarentenas totales en la Región Metropolitana, la "tradición" ciudadana se mantuvo en pausa. Sin embargo, el viernes previo al aniversario del estallido social del 18 de octubre fue el momento elegido para que miles de personas se dieran cita en el punto neurálgico de las manifestaciones sociales.
Como se sabía que la jornada prometía ser masiva, los pocos locales comerciales que habían abierto sus cortinas en las últimas semanas en la denominada "zona cero" decidieron cerrar a mediodía y enviar a sus trabajadores a sus domicilios.
Cerca de las 16 horas comenzaron a llegar los primeros manifestantes, y de inmediato llamó la atención como un grupo de encapuchados se tomó el monumento al general Baquedano y lo pintó de rojo, en un simbolismo a los actos de violencia que se han registrado en Plaza Italia en las últimas semanas. El acto incluyó una corona de flores y el mensaje "por los caídos".
"Siendo un cuarto para la cinco de la tarde, que ya estemos con estas manifestaciones, que ya esté el carro lanzaguas, que ya hayan violentado el monumento de Baquedano es un muy mal augurio", comentó el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, quien siguió en vivo a través de Chilevisión el inicio de la manifestación.
"Hay manifestantes y violentistas, y estos son violentistas, espero que empaticen un poco y que solidaricen con los 30 mil vecinos que viven, con los locatarios que trabajan ahí, que son 10 mil personas y que hace prácticamente un año han tenido ingresos muy bajos, a punto de la quiebra", se lamentó la autoridad comunal.
EN CIUDADES
Con el paso de las horas, el panorama cambió y dio paso a cientos de personas que llegaron a Plaza Italia con banderas y gritando consignas alusivas al aniversario del estallido social.
En términos legales la comuna de Santiago y Providencia no tienen autorización para reuniones de personas de más de 50 personas. Sin embargo, Carabineros decidió retirarse del lugar y seguir a distancia el rumbo de la manifestación, que a esas alturas ya tenía el tránsito completamente cortado y presentaba incidentes aislados.
Pasadas las 18.00 horas, y con casi tres mil personas reunidas en Plaza Italia, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, señaló que, además de las manifestaciones en el centro de Santiago, había "también algunas reuniones en Valparaíso y en algunas otras regiones, pero con todavía un grupo bastante delimitado de personas".
Se trataba de Temuco, Rancagua y Valparaíso, comuna donde encapuchados protagonizaron enfrentamientos con Fuerzas Especiales de Carabineros.
Cuando cayó la noche, comenzaron los incidentes más graves en los alrededores de la Plaza Italia. De acuerdo a la versión oficial, al cierre de esta edición se habían detenido siete personas por desórdenes públicos, en lo que fue la primera manifestación masiva en tiempos de coronavirus.
Ejército pidió trasladar el monumento
A través de una declaración Pública, el Ejército de Chile lamentó el daño que sufrió el monumento de Plaza Baquedano en la manifestación ciudadana de ayer. La institución aseguró que la memoria del héroe de guerra es "vulnerada por la actitud de algunas personas que vuelcan su resentimiento y frustración", y de paso solicitó el trasladado de la estatua de bronce a un sector donde pueda ser custodiada por militares.
"En caso que ello no pueda ser garantizado, éste sea trasladado a un lugar público, cercano al Edificio Ejército Bicentenario, para que quede bajo la protección y resguardo del Ejército de Chile", dice la declaración.
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