Uno de los protagonistas especiales del superclásico fue el volante de Universidad de Chile Jean Beausejour.
El morocho volvió al estadio Monumental a enfrentar a sus ex compañeros, pero ahora defendiendo los colores del Bulla. Obviamente que fue el blanco de las pifias y los cánticos de los garreros.
Tanta fue la mala onda que en el comienzo del partido se repartieron billetes con el rostro del volante. La idea era recriminar la decisión de cambiar la alba por la azul. Una vez comenzada la mocha, la hinchada colocolina se dedicó a pifiar cada jugada del volante.
CARIÑO
A pesar de la mala onda de la hinchada, "Bose" fue puro cariño con sus ex compañeros. Una vez en la cancha, el moreno abrazó a cada albo que se le cruzó y tuvo un especial encuentro con Esteban Paredes.
En lo estrictamente futbolísticos, Beausejour tuvo un partido malito. Más preocupado de las subidas de Luis Pedro Figueroa que de pasar al ataque, el morocho tuvo mucha acción en las acciones del partido.