Bestial ataque a carabinero y su pingo

La marcha para conmemorar los 38 años del golpe militar partió a las 10.45 desde la plaza Los Héroes y fue súper pacífica hasta que llegó al Cementerio General.

En un pequeño escenario hubo un acto donde cantó la voz de Illapu, Roberto Márquez, y algunos líderes de izquierda se dirigieron a las aproximadamente 6 mil personas que participaron de la manifestación.

Al mismo tiempo en que finalizaba la ceremonia un grupo de babosos que no superaba los 50 armó una barricada en Recoleta.

Durante toda la marcha carabineros había mantenido una prudente distancia de la multitud, que varias veces gritó en memoria del joven Manuel Gutiérrez Reinoso (16), muerto presuntamente por un disparo de un carabinero dado de baja.

El lumpen agarró a peñascazos a unos reporteros y camarógrafos de la tele, a sus móviles y prendió una fogata que un grupo de Fuerzas Especiales con el guanaco fue a apagar.

Esa rutina se repitió varias veces hasta que alrededor de las 13.15 la policía persiguió a los encapuchados que se refugiaron al interior del cementerio.

Entre medio de las tumbas se vivieron las escenas más violentas. Un carabinero recibió un peñascazo, quedó inconsciente en el suelo y debió ser rescatado por algunos manifestantes de buen corazón que lo alejaron de un grupito de energúmenos que lo apedreó cuando estaba lona.

Se trata del sargento segundo José Inostroza Crisóstomo, de la Segunda subcomisaría montada, quien se recupera de sus lesiones en el  hospital institucional.

Su caballo también fue víctima del lumpen porque un tonto le atravesó la mandíbula con un fierro y lo dejó fuera de combate.

Debido a los disturbios fue cerrada por un rato la estación Cementerio de la línea 2 del Metro, lo que provocó la ira de algunas personas que querían refugiarse en su interior.

Las escaramuzas y enfrentamientos no duraron más de una hora y el total de detenidos fue  de 24, (tres mujeres).

La cifra de heridos fue de quince, diez carabineros y cinco civiles, entre ellos algunos reporteros con lesiones leves.

La intendenta metropolitana, Cecilia Pérez, destacó que la marcha fue pacífica durante la mayoría del rato y calificó de "cobardes encapuchados" a los ídem.

Más de 13 verdes lesionados en mochas

Al menos 14 carabineros resultaron lesionados durante los disturbios de anoche en diferentes zonas de la capital.

El teniente César Muñoz, de la 14a Comisaría de San Bernardo, sufrió casi 40 impactos de perdigones en la mano y la pierna, mientras intentaba disuadir el saqueo a un supermercado ubicado en calle Condell en Los Morros. En calle Parinacota de Quilicura, una turba le disparó al suboficial Carlos Encina Garzón, de Fuerzas Especiales.

Ambos fueron derivados hasta el Hospital de Carabineros, donde se recuperan de sus heridas, junto a otro suboficial que perdió un ojo por una pedrada.

En Villa Francia una turba de 10 pergenios quemó una micro que quedó en plena calle 5 de Abril. Según relataron testigos del hecho, el chofer de la oruga, recorrido 101 Cerrillos Huechuraba, quiso retroceder para evitar el ataque de encapuchados, cuando el piño le lanzó bomas molotov.

Por otro litro, una joven estudiante de El Boque identificada con las iniciales J.M.A. (15) fue derivada al hospital Barros Luco tras ser baleada en el pecho. En la madrugada se investigaba quiénes  realizaron el disparo.

En Santiago Centro encapuchados quisieron incendiar la iglesia Salvador en dos oportunidades, pero Carabineros los dispersó.

Chilectra confirmó que el jaleo dejó sin luz al menos a unas 35 mil personas en todo Santiago.

El calor puso más roja a Camilita

Nos costó caleta dar con Camila Vallejo en la marcha porque no avanzó en el primer lote junto a veteranos dirigentes de izquierda.

Ella, bajo el inclemente sol,  marchó con los suyos, los cabros de las juventudes comunistas.

Camila encabezó el grupo junto a otras ocho chiquillas de camisas rojas. Con el puño izquierdo apretado y una bandera roja en la otra mano, la líder estudiantil caminó hasta el cementerio rodeada por sus compañeras y no quiso dar entrevistas durante el trayecto.

Cuando llegó al camposanto aceptó conversar con la prensa, se sacó fotos con sus admiradores, y junto a un joven de polera con cuello se fue de la mano a dejar una flor al memorial de los detenidos desaparecidos.

Sobre la renuncia que exigen del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, dijo que "él encarna la responsabilidad política ante los hechos acaecidos en las últimas manifestaciones que han sido de una brutal represión y una violencia excesiva de parte de las fuerzas policiales. Hay una política que ha estado detrás de todo esto, no son hechos aislados; la tortura, el asesinato de Manuel Gutiérrez, las detenciones ilegales... son responsabilidad del ministro del Interior".

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