Así como están las cosas, hasta Salvador Capitano tendría chances de dirigir a la Albiceleste, luego de tomar una capacitación con Seba Beccacece. Sin embargo, al otro lado de los picos nevados lo único que quieren es ver a Jorge Sampaoli con el pitillo en reemplazo de Bauza.
Claro que por ahora su fichaje es más difícil que ver al colorado Liberman gritándole "egocéntrico" a Lucho Jara. Aparte del palo y medio verde que tendría que pagarle la AFA al Sevilla, el "Chico" debe quedarse hasta el fin del torneo pepillo (tercera semana de mayo) y meter a su team en la Champions.
Ya, hasta ahí tampoco es taaan rudo que "Minimí" cumpla su sueño, aunque eso signifique que sus detractores lo hagan pebre. ¿Bichi, eres tú? No, señor. Fíjese que ayer salió al baile Carlos Bilardo, capo del mundo con Argentina en el Mundial de México 86.
"Si Sampaoli es el número uno para dirigir, yo me voy a Turquía. No sirve para nada, sólo es amigo de dos o tres periodistas chilenos que le dieron manija. Tampoco es bueno. No es ni buen técnico ni buena persona", fue la crítica del "Doctor", de 78 años.
Lo peló sin asco
En declaraciones a Radio La Red, además, indicó que "en Chile fue un desastre lo que hizo (...) Hay alrededor de 10 técnicos argentinos mejores que él. No puede ser que nos hayamos roto el alma durante tantos años, con dos campeonatos mundiales y subcampeonatos, para que ahora mencionen a este tipo".
¿El origen de la mala onda? "Yo defendí a Sampaoli y él después me dijo 'antifútbol'. ¿Quién es él para pegarme a mí? Si viene tomo un barco y me voy a Uruguay", vomitó, pa' luego cerrar con que los bifes "deben estar a la altura de Brasil. El técnico es el responsable, pero nunca le diría pone a este o aquel, no me gustaba que me lo hicieran a mí".