En tiempos donde mientras más colorinchi, parece que mejor es, Puma se atrevió a lanzar un chuteador clásico negro para los futbolistas.
Se trató del Puma One, la última chupá del mate en términos tecnológicos y estéticos de la poderosa marca alemana y que ayer, con todo el glamour del mundo, fue presentado en sociedad para la apolínea Vanesa Borghi junto a Óscar Opazo y Álvaro Salazar.
Claro que lo más jocoso del magno evento, donde se alabó al tato que fue aprobado nada menos que por Titi Henry, sucedió cuando la diosa de Morandé con Compañía, que es colocolina hasta el colaless, le pidió al "Torta" que la rompa con el "negro".
VANE BORGHI QUIERE EL TÍTULO
"Quiero el título con este, eh", le dijo con ese acento enloquecedor argentino la modelo a Opazo, que minutos antes se había descartado con usar la maravilla negra, ya que por cábala usa unos amarillos chillones que le han permitido agarrar una racha penetrante impensada. Por algo lleva tres goles.
"Todos los colocolinos queremos seguir en esta racha, seguir punteros, entonces hay que ser exigentes", lo apuró la única Borghi flaca, por lo que al porteño no le quedó más que agachar el moño.
Después del "apriete", el lateral relajó las presas contraídas con un pequeño juego de la mesita, que inventó Neymar, donde sacó a pasear a Álvaro Salazar con un rotundo 5-1.