Buscan a cuarto descuartizador de Chimbarongo

En prisión preventiva quedó ayer el trío de amantes diabólicos que, según la Fiscalía, conspiró el pasado 15 de abril para asesinar y descuartizar al obrero agrícola Segundo Antonio Navarro Moraga (56), en su domicilio de la población Pablo Neruda, de Chimbarongo.

En el control de detención, realizado en el Juzgado de Garantía local, la fiscal Teresa Gaete imputó por el delito de parricidio al presunto autor intelectual y material del homicidio, Domingo Antonio Navarro Olivares (22), hijo de la víctima, y por homicidio calificado a sus "amigas", Marlén del Rosario Díaz Martínez (23) y Paula Andrea Barahona Opazo (27).

Según el Ministerio Público, el grupo se confabuló para asesinar al agricultor con el fin de quedarse con 14 millones de pesos que éste había recibido por la expropiación de sus tierras, las que serán usadas en la construcción del embalse de Convento Viejo.

Durante la audiencia, "El Chuncho Chico", como apodan al presunto parricida, le habría prometido 300 lucas a Marlén para que participara en la masacre. Paula alega total inocencia en los hechos.

Para lograr su cometido, el delincuente organizó un asado en la casa de su padre y cuando éste cayó a la cama, ebrio y soñando con los angelitos tras un "encuentro cercano del tercer tipo" con Marlén, perpetró la carnicería, en la que se utilizó una sierra y un cuchillo.

La mayor parte de los restos de la víctima ya fueron recuperados de los canales, riachuelos y arroyos de la zona por funcionarios de la PDI.

Los hechos fueron calificados como graves por la jueza de Garantía, Teresa Rodríguez Fondon, debido a la existencia de agravantes como premeditación, alevosía y ensañamiento.

En las últimas horas trascendió que la PDI investiga la participación de una cuarta persona en el crimen.

La pequeña hija de Marlén, que habría presenciado los hechos, quedó a cargo de la Unidad de Protección de Testigos, y cuando se encuentre en condiciones sicológicas de declarar, será interrogada por la Fiscalía.

LO ASFIXIARON CON UNA TOALLA

Según ha podido establecer la Fiscalía, luego de apalear a su padre, "El Chuncho Chico" le puso una toalla mojada en la cara para asfixiarlo. Enseguida el cadáver fue carneado. Los restos los depositaron en cinco bolsas de basura, mientras las mujeres se dedicaron a limpiar el sitio del suceso.

Al día siguiente, Marlén se encargó de botar en un canal de regadío del sector Peor es Nada el cuchillo y el serrucho, mientras "El Chuncho Chico" estampó una denuncia por presunta desgracia y pegó letreros para que la comunidad lo ayudara a buscar a su viejo.

Pero el lunes un amigo de borrachera lo escuchó narrar cómo había masacrado a su padre y lo denunció a la PDI.

J. Pinto/M. Vega

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