Repartir trípticos con consejos a los vecinos, recoger la basura del colegio, plantar árboles en las plazas, reciclar papeles y convencer a sus amigos de que hay que salvar el planeta son algunas de las tareas de los flamantes "forjadores ambientales" de Ñuñoa.
Emilio Carril y Javier Arenas son dos estudiantes de séptimo básico del colegio Lenka Franulic y ayer, en medio de las celebraciones ñuñoínas del Día del Medio Ambiente, fueron distinguidos con tal 'biodegradable' cargo. "Lo que tenemos que hacer ahora es incentivar a la gente a que recicle y que separe todo lo que se puede guardar como vidrios y plásticos", explicaron.
Durante la jornada, un grupo de voluntarios recorrió la comuna retirando todos los cachureos acumulados de las casas, entre los que figuraban televisores, colchones y hasta tazas de baño para ir al trono.
"Esta es una actividad que hacemos desde hace 10 años para juntar los cachureos y separar lo que más podemos para llevarlos a nuestra planta de reciclaje", aseguró el alcalde subrogante, Miguel Ángel Ponce de León.
Otra forma de conmemorar el día en que le hacemos nanai a la Madre Tierra se realizó en la Plaza de Armas, donde diversas organizaciones convocaron a una manifestación pacífica a la que acudieron unas mil personas. Allí anunciaron una nueva gran marcha para el próximo viernes a las 19.30 horas.
SE RECICLARON FELICES PARA SIEMPRE...
Con disfraces de Blancanieves y la Cenicienta confeccionados con materiales reciclados, unos 38 niños del jardín infantil Juan de Austria, conmemoraron el Día del Medio Ambiente.
Gracias a la ayuda de la experta en moda reciclada, Soledad Vega, los niños convirtieron cortinas de baño, servilletas y bolsas plásticas en trajes de alta costura.
