Una tromba marina arrasó con dos casas en Toltén, en la Región de la Araucanía, mientras otra sorprendió a los habitantes de Curiñanco, en Valdivia. ¿La razón? Un rarífico fenómeno atmosférico que se ensañó con el sur del país.
Los fuertes vientos de la tromba volaron ventanas y techumbres de cerca de seis casas y destruyeron por completo un garaje en Toltén. Se trata de algo que no se veía muy habitualmente en Chile, pero que ahora será cada vez más común, según los expertos.
“Probablemente seamos testigos de ellos cada vez más”, soltó al diario pop la meteoróloga Michelle Adams.
Iván Torres, caperuzo del tiempo, aseguró a La Cuarta que “vamos a tener que acostumbrarnos a estos fenómenos, que son poco frecuentes acá, pero que se deben al cambio climático”.
Muchos de los testigos de la tromba suelen confundirlos con tornados, sobre todo porque son un calco, pero a menor escala.
Michelle explicó que si afina la mirada puede cachar que la tromba es “mucho más delgada que un tornado, tiene menor diámetro e incluso se puede ver a través de ella. Pueden durar 15 minutos, mientras que un tornado tiene mayor duración. Tienen un diámetro entre 10 y 20 metros. Es como un pequeño hijo”.
Torres reveló que “hace varios días existió en esa zona bastante inestabilidad en la atmósfera. Eso puede generar un tipo de nubosidad llamada cúmulos, que son nubes de desarrollo vertical, que hacen que se genere este fenómeno que afectó al sur del país”.
Adams afirmó que no se sabe con exactitud la potencia que alcanzó esta tromba y agregó que “aunque tienen una vida corta son capaces de matar a una persona y destruir viviendas”.
El meteorólogo de TVN soltó que “es importante señalar que se generan en el agua y cuando tocan tierra pierden intensidad, se debilitan. En este caso no sé si fue una tromba marina tornádica o no tornádica. Hay que hacer un estudio”.
