“Hay un alza que no tiene nada que ver con el resto del país”, reveló el persecutor.
Ante la ola de delitos violentos ocurridos en la Región de Tarapacá, marcado por el secuestro extorsivo y homicidio de un comerciante de Iquique, el fiscal regional Raúl Arancibia compartió su análisis.
Cabe recordar que, la semana, el propio persecutor reconoció que “debemos prepararnos para una criminalidad distinta. Para eso necesitamos apoyo tecnológico, necesitamos capacitación tanto la Fiscalía como las policías”.
Este martes, en diálogo con 24 Horas, Arancibia profundizó en su preocupación. “Vemos cadáveres que han sido quemados, signos de tortura y una violencia extrema de la que no estábamos acostumbrados”, sostuvo.
Asimismo, indicó que “llevo casi 20 años como fiscal de Tarapacá, además de ser iquiqueño, pero el aumento de la criminalidad ha sido muy fuerte en especial en estos dos años”.
“Pasamos de delitos habituales a una situación más profunda, seria y violenta, incluyendo nuevos ilícitos como sicariatos, préstamos de dineros, tráfico de personas y de armas. Todo esto crea una tormenta perfecta por las características fronterizas de la zona”, sostuvo.
Por lo mismo -afirmó el fiscal- la situación es “preocupante, porque el homicidio es el resultante de todo esto”.
“Hay un alza que no tiene nada que ver con el resto del país. Puede ser que en el resto de Chile sea una situación distinta, aquí es grave”, complementó.
Organizaciones criminales
De paso, aclaró que “siguen liderando los crímenes cometidos por chilenos (...) el 30% de los imputados y víctimas ahora son personas de nacionalidad extranjera”.
Eso sí, reveló que “hay antecedentes importantes de algunas organizaciones criminales extranjeras que operan en la zona, sobre todo en el tema de la droga, agrupaciones colombianas y mexicanas, que encontraron atractiva esta zona como atractiva para el narcotráfico”.