Sus amigos lo despidieron vestidos con un gi, el traje usado para practicar el arte marcial.
Leandro Lo, uno de los más grandes campeones de Jiu-Jitsu de todos los tiempos, recibió un balazo en su cabeza en Sao Paulo el pasado domingo.
Durante el velorio hubo escenas de dolor por la muerte del ocho veces campeón mundial de Brasil.
Aunque también emotivas, como cuando sus amigos y familiares siguieron el pedido de su madre de asistir a la ceremonia usando un gi, el uniforme usado en el Jiu-Jitsu, el arte marcial que le dio un nombre en su país.
El sospechoso del tiroteo, un oficial de policía fuera de servicio, se entregó y está bajo custodia.
¿Cómo murió Leandro Lo, el campeón de Jiu-Jitsu?
El tiroteo ocurrió en el Esporte Clube Sírio de Sao Paulo, donde Lo, de 33 años, asistía a un evento junto a sus amigos.
Según testigos, un hombre se acercó a su mesa, tomó una botella y la agitó de manera amenazante.
Un abogado de la familia dijo que el ocho veces campeón mundial de Jiu-Jitsu agarró al hombre y lo inmovilizó contra el suelo.
Luego, sus amigos ayudaron a levantarse. Fue en ese momento exacto, cuando “el tipo supuestamente se dio la vuelta, sacó un arma y le disparó a Leandro en la cabeza”, dijo el abogado Ivan Siqueira Junior a la agencia de noticias AFP.
Leandro Lo fue llevado rápidamente hasta un hospital donde fue declarado con muerte cerebral.
En Brasil, en tanto, se abrió una investigación por asesinato.
Sentido homenaje
Su madre rindió homenaje a Lo en una publicación en Instagram, donde sintió que “faltaba una parte de ella” luego de que “mi héroe” fuera asesinado.
“Me aferraré a los buenos recuerdos, que hay muchos. Me hiciste sentir como la madre más querida del mundo”, agregó.
El sacerdote del funeral de Lo, habló en contra de la violencia armada en la ceremonia. “El que mata, nunca gana”, dijo.
También pidió una ronda de aplausos para aquellos a los que llamó “luchadores por una buena causa”, los compañeros luchadores de Jiu-Jitsu de Lo, que se habían presentado en sus trajes gis.
La hermana menor de Lo, Amanda, de 29 años, dijo que la familia planeaba establecer un instituto que llevaría el nombre de su hermano para hacer trabajo social.
Funerales
El cuerpo del artista marcial fue llevado en un ataúd abierto desde la capilla hasta el cementerio con sus compañeros atletas formando una guardia de honor para presentar sus respetos.
Según el diario Folha, mientras bajaban el ataúd al suelo, algunos gritaron “es el campeón”.
Los amigos de Lo contaron que se estaba entrenando para una competencia en los Estados Unidos.