Capo de la Armada flota como plumavit

Pese a las fuertes críticas de distintos sectores del mundo político que exigían la cabeza del comandante en Jefe de la Armada, Edmundo González, por haber levantado la alerta de tsunami tras el terremoto, integrantes de la comisión investigadora de la Cámara de Diputados recomendaron calma antes de pedir renuncias.

Durante la mañana la senadora democratacristiana Soledad Alvear invitó al almirante a que cerrara la puerta por fuera, porque el error garrafal tuvo un alto costo en vidas humanas y "alguien debe asumir la responsabilidad".

Asimismo, su compañero de partido y presidente del Senado, Jorge Pizarro, abordó el Huáscar y lo lanzó a toda velocidad contra el marino para espolonearlo y echarlo a pique.

"Desde el punto de vista personal, él debería haber renunciado, porque no estuvo a la altura de las circunstancias, y si decide renunciar, se evaluará su gesto, y si no, se establecerán las responsabilidades en la Cámara", comentó el senador.

Sin embargo, entre los miembros de la comisión que investiga los condoros que se mandaron las autoridades el 27 de febrero, algunos honorables saltaron para defender a González.

Tras los dichos de la senadora, el diputado PPD Cristián Campos, electo por Talcahuano y Hualpén, disparó contra la Chol y le reprochó que "no tenía ni idea de lo estaba pasando en la VII Región, y no es sano andar desviando la atención solicitando renuncias".

El también diputado PPD Pepe Auth se sumó a los presta ropa y recordó que es muy feo hacer leña del árbol caído, sobre todo en el caso de uno de los pocos personajes que dio la cara apenas comenzaron las acusaciones.

"Es injusto que hoy se quiera pedir la renuncia a los únicos que pusieron el pecho a las balas", alegó Auth.

En el oficialismo, el presi de la comisión investigadora, Jorge Ulloa (UDI), y los diputados Gustavo Hasbún (UDI) y Joaquín Godoy (RN), también respaldaron a González y pidieron dar tiempo a la investigación.

Por la polémica ya abandonaron sus cargos los ex directores del SHOA, Mariano Rojas, y de la Onemi, Carmen Fernández.

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