"Esto fue un accidente, algo absolutamente involuntario", sostuvo Sebastián Zamora.
Siguen las repercusiones por la situación ocurrida el pasado viernes 2 de octubre, cuando un joven de 16 años cayó al lecho del río Mapocho tras ser empujado por un carabinero. El uniformado, Sebastián Zamora (22), fue dado de baja en en este minuto se encuentra en prisión preventiva tras ser formalizado esta semana por el delito de homicidio frustrado.
Por lo mismo, y a un poco más de una semana de los hechos, el funcionario policial rompió el silencio y habló de la situación, la cual generó diversas protestas durante los días posteriores.
"A él le diría que nunca, nunca, jamás quise empujarlo para que se cayera. Mi trabajo era solo detenerlo por los destrozos que se estaban realizando ese día. Nada más. Esto fue un accidente, algo absolutamente involuntario", sostuvo en diálogo con El Mercurio.
Además, sostuvo que "chocamos, y como veníamos los dos corriendo muy rápido, la fuerza y la velocidad que traíamos hizo que él cayera (...) sentí mucha angustia, desesperación. No podía creer que se había caído. Lloré mucho cuando volví a la unidad".
"Jamás pensé..."
Y sobre la misma, agregó: "Ha sido el peor día de mi vida. Jamás pensé que podría estar en una situación como esta. Tengo pena al ver en todo lo que se ha transformado mi caso. Al fin y al cabo, esto nos afectó a dos personas, que nos vimos enfrentados por problemas de otros, no nuestros".
Cabe destacar que fueron varios los videos de lo ocurrido en el puente Pío Nono que se viralizaron a través de redes sociales, los que posteriormente fueron expuestos en la formalización.