Durante este miércoles, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Rancagua condenó a un hombre a 10 años y un día de cárcel por el robo de un celular.
De acuerdo a la información entregada en la audiencia, Luis Felipe Soto Ureta intimidó a su víctima con un fierro para cometer el ilicito.
Dura condena
Además de la pena de presidio efectivo, el tribunal ihabilitó al hombre de forma perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos, para profesiones titulares durante el tiempo de la condena y al pago de las costas de la causa.