Un duro rival fue Ecuador en el Estadio Monumental, equipo que estuvo a punto de aguarle la fiesta a la Roja en la penúltima fecha clasificatoria.
El equipo de Pizzi dominó todo el partido ante los tricolores, pero los goles se demoraron un poquito en llegar. Fue gracias a una genialidad de Jorge Valdivia que aparecería el primer gol del partido.
El Mago desbordó e hizo la pausa necesaria para pillar a Eduardo Vargas solito en el área, quien fusiló al arquero ecuatoriano.
Tras el término del primer tiempo, se pensó que la Roja por fin remataría el cotejo. Sin embargo, el segundo gol nunca llegó (Eugenio Mena y Jorge Valdivia tuvieron dos goles cantados), cosa que todo el Monumental lamentó a los 84', cuando Romario Ibarra aprovechó un centro y sentenció a Claudio Bravo.
Los fantasmas volvieron a aparecer. La Roja volvía a perder puntos en el final del partido, aunque no duraría mucho la ventaja.
Fue tras un canchereo de un defensor tricolor que Arturo Vidal logró robar una pelota, la cual dejó servida a Felipe Gutiérrez. El jugador el Inter fusiló al portero, quien la sacó dejándole el rebote a Alexis Sánchez, quien se puso la capa vistiéndose de héroe. Fue 2-1 que dejó al equipo de Pizzi tercero en la tabla y con más vida que nunca para la última fecha clasificatoria, donde buscará timbrar los pasajes a Rusia en Sao Paulo.